Análisis de 'Necrobarista' para PC, un espresso de muerte

Morirse es lo peor. Obviamente, ¿no? La vida se acaba, la gente te echa de menos, dejas muchas cuentas pendientes que no sabrás si se cumplirán o quedarán en el olvido. Toca pasar a otro plano de existencia, si es que existe alguna clase de existencia en la oscuridad más allá de nuestro día a día. Pero, con un poco de suerte, podrás entrar en términos con lo que viene y aceptar tu sino. Un poco de tiempo antes de irte del todo. Esa es la oportunidad que da la Terminal, una cafetería australiana que atiende a los recién fallecidos durante veinticuatro horas antes de que te vayas para siempre. Un tránsito, un momento para detenerte y aceptar lo que viene. Esta es la premisa de 'Necrobarista'.

Lo es al menos sobre el papel, porque la trama que esconde la Terminal va mucho más allá. Alquimia, muerte, burocracia. 'Necrobarista' envuelve toda su historia en un aura de familiaridad y misterio que encajan a la perfección con la clase de novela visual que quiere ser: una más vistosa de lo habitual, energética y llena de personalidad para atraer a toda clase de jugadores y lectores. Y lo consigue, al menos en su superficie.

Cultura de la muerte

Antes de desgranar la historia hablemos del apartado visual de 'Necrobarista', su mayor punto fuerte y razón de existencia. Como novela visual su objetivo es claro en todo momento: atrapar la atención de los jugadores más allá de aquellos que ya estamos familiarizados con el género. Lo hace rompiendo algunos de sus tradicionalismos, principalmente convirtiendo todo en un movimiento de cámaras, dinámicas animaciones de los protagonistas, convirtiendo algunos puntos de lectura en algo que podemos ver y apreciar de forma directa. Y todo esto lo hace sin dejar de ser una novela en su corazón.

Las escenas de 'Necrobarista' se dividen en dos partes. Las de historia son estas llenas de movimiento y energía, con momentos en los que ni siquiera hay texto, sólo un momento de contemplación. Todo el texto que leemos en estos momentos son diálogos, nada más. Y aun así expresa lo que mil palabras no podrían; permite al lector jugar con tiempo, darse un momento, apreciar el momento; tal y como harías con un buen café en tu cafetería favorita, con el ruido de las tazas y los susurros de la gente.

No hay ningún tipo de doblaje y se ha comentado en otras reviews del juego como un punto negativo, pero quiero destacarlo como una decisión más que acertada. La silenciosa voz de nuestros protagonistas hace que, junto con esas descripciones sin palabras y escenas visuales, hagamos apreciar este título como una novela. Entregamos nuestra interpretación, nuestros pensamientos y emociones en el momento. Doblar a los personajes hubiese convertido el juego en algo lejano al concepto de novela visual cuando, en su estado actual, es perfecto para lo que buscaba desde hacía tiempo: la transición perfecta para convencer a amigos y conocidos de que este género tiene mucho potencial que ofrecer, que merece la pena dedicar las horas a la lectura.

Un día para los muertos

El segundo tipo de escena que 'Necrobarista' comparte con nosotros se acerca mucho más a la concepción que muchos tenemos de una novela que las de la historia principal. Se desbloquean a nuestro ritmo y gusto entre capítulo y capítulo, y nos ofrecen pequeñas historias narradas en tercera persona acerca de pequeñas aventuras que han sucedido en la cafetería, personas que han pasado y captado la atención de nuestros chicos, o sencillamente las locuras de la niña adoptada en este lugar. Atrapan una escena y nos exponen largos textos, quizás con algún efecto de sonido para acompañarlas.

Estos relatos profundizan en el mundo de 'Necrobarista' y nos cuentan mucho más a fondo quiénes son nuestros protagonistas. Son, eso sí, actividades secundarias que cuestan un precio: al final de cada capítulo se nos pide seleccionar una serie de palabras pronunciadas durante él, y debemos recordar a qué se relacionan para conseguir elementos concretos de ellas para desbloquear relatos concretos. Leerlo todo requiere tiempo, atención y mucho esfuerzo; es una manera de añadir rejugabilidad, aunque releer la historia no parece una opción para disfrutar nada más acabar con la aventura principal.

Más allá de estas lecturas adicionales, las cuales seleccionamos caminando por la Terminal en primera persona, no hay mayor interacción entre usuario y el juego. Es un ejercicio de lectura, no una aventura de acción; es el mismo inconveniente que presenta para muchos jugadores este género, que no hay una atención previa por tener que hacer algo por ellos mismos. La pregunta real que queda por tanto es si consigue capturar el interés para ambos públicos con su trama, si merecen la pena sus personajes. La respuesta es un rotundo sí.

Atrápame esos muertos

Entrar en detalles sobre lo que nos cuenta 'Necrobarista' es territorio peligroso de spoilers. La Terminal es mucho más de lo que aparenta a simple vista, y sus trabajadores tampoco son simples baristas a los que les encanta su trabajo. De hecho, la dueña del bar parece que deteste hacer cafés, especialmente los que tengan más de tres ingredientes para hacer disfrutar del cliente. No, sus intereses están fijados en otra parte, algo mucho más siniestro y que alcanza objetivos mayores que unos simples cafés...

Desde luego, 'Necrobarista' no funcionaría sin sus tres elementos clave: su apartado visual, sus personajes y, sobre todo, su excelentísima banda sonora. Kevin Penkin se ha convertido en un nombre al que debo seguir mucho más de cerca a partir de ahora gracias no sólo a anteriores trabajos que ya brillaban por su excelencia como 'Florence'; en esta ocasión se ha coronado con unas notas musicales brillantes y con una personalidad única que no he visto en otros juegos baristas. La forma de expresarse con notas del piano diferentes o composiciones que van más hacia los sonidos bajos para expresar la mortalidad en el aire. Es un trabajo maestro digno de admiración que merece escucharse por separado al juego, aunque también se tiene que destacar que es cuando se une a este cuando mejor funciona.

En resumen: esta novela visual parece que lo tiene todo a su favor para considerarse entre las grandes, pero le pesa un elemento importante. Es una historia realmente ligera, con apenas cinco horas de contenido en el momento de su lanzamiento: deja con ganas de más y con necesidad de pedir un café largo que nos deje estar más tiempo en la Terminal. Y aunque tenemos el límite de horas antes de partir a lo desconocido parece que es algo que se solucionará con el tiempo. Route 59 ha prometido futuros DLC gratuitos que expandirán la historia de algunos de los personajes, dejándonos así disfrutar de una gama de cafés que ahora mismo tan necesario se hace. Pero no podemos juzgar el futuro por el momento, sólo aquello de lo que disponemos.

Conclusiones

'Necrobarista' es un café espresso que terminas mucho antes de lo que quisieras, pero uno de los mejores espressos que has probado en tu vida. Todos los elementos juegan a su favor para crear una novela ligera con emoción y pasión. Es una aventura que definitivamente no podrás olvidar, y que todo el mundo debería disfrutar, tanto si siguen el género de la novela visual como si no. De hecho, esta es la puerta perfecta a un mundo desconocido para esa gente. Da miedo y rechazo, sí, pero tomad la Terminal como esa transición. Dejad que su aroma a café os convenza.