2015 ha sido el marco elegido por Nintendo para que su consola de sobremesa actual, Wii U, le abriese las puertas a Nintendo 64, Wii y Nintendo DS en la Consola Virtual, una forma de rentabilizar obras que ya no tienen cabida en las tiendas pero que la gente sigue queriendo tener a mano sin acudir a los sistemas originales. Hoy analizamos un grande de Nintendo DS, nada menos que la segunda parte de la saga JRPG de los fontaneros del Reino Champiñón, 'Mario & Luigi: Partners in Time'.
A finales del año 2003, cuando Game Boy Advance daba sus últimos coletazos en la industria, recibimos a manos de Alpha Dream un verdadero clásico instantáneo que se tomaba muy en serio todas las premisas estipuladas por 'Super Mario RPG' pero adaptándose al concepto portátil, simplificando mecánicas pero con una profundidad y pasión por el detalle bastante elevados. Ese título, 'Mario & Luigi: SuperStar Saga', fue el detonante de otros tres títulos y un crossover con 'Paper Mario' que podremos catar el próximo año; y ahora, en verano de 2015, podemos disfrutar de nuevo del que es para un servidor uno de los dos mejores de la ya extensa franquicia, 'Mario & Luigi: Partners in Time'.
Sentando las bases de la saga
Nada más comenzar la aventura tenemos el primer detalle de calidad, pues en vez de crear al enésimo enemigo carente de personalidad y con excesivos clichés, se decidió coger al que nos encandiló en 'Luigi's Mansion' años atrás, el siempre turulato profesor Fesor. En esta ocasión ha creado una máquina del tiempo que se nutre de la Estrella Cobalto. No tenemos la más mínima intención de centrar el texto en el argumento, ya que para ello tendréis que vivirlo por vosotros mismos, pero os podéis imaginar que algo inesperado sucede y es ahí donde entramos nosotros, Mario y Luigi, para salvar -sorpresa- a Peach.
Y es que 'Partners in Time' cumple con todo lo que su antecesor puso sobre la mesa para mejorar la experiencia original de GameBoy Advance, pulirla y adaptarse a las posibilidades de la doble pantalla de Nintendo DS, pues ese componente de JPRG clásico sigue presente desde el minuto uno, con una nada desdeñable cantidad de puzles, exploración combates por turnos, enigmas, jefes con patrones de actuación...
Es en realidad continuista; Alpha Dream no quiso innovar en ninguna mecánica sino asentar lo ya existente, de forma que el factor sorpresa del original desaparece casi por completo pero con el mismo buen sabor de boca de siempre. Ahora, que lo hemos podido jugar en Wii U tanto en la pantalla del televisor con una cómoda relación de aspecto o únicamente en el Wii U Gamepad, hay que decir que la experiencia sigue siendo muy satisfactoria, pero donde verdaderamente se disfruta es en una Nintendo DS, su hardware madre. Puede que se trate simplemente de una opinión personal, que ni mucho menos indica la opinión por antonomasia que puedas tener tú al jugarlo, así que simplemente quedémonos con lo importante: cuesta 9.90? en Wii U y se juega de lujo en tu televisor gracias al escalado a HD.
Igual que el primer día
Haberlo podido jugar casi 10 años después de su lanzamiento original ha servido para comprobar si el trabajo de este estudio second party de Nintendo pensó en el futuro, es decir, en que su proyecto pudiera ser igualmente disfrutable a nivel visual con el paso del tiempo. Por suerte es así, con unos modelados en completas dos dimensiones perfectamente dibujados y coloreados, haciendo un uso de la paleta de colores sencillamente genial. Los verdes, rojos y demás colores primarios y secundarios están ligeramente saturados, algo que hace muy sencilla y agradable la partida al tiempo que vamos avanzando sin perder de vista en ningún momento lo que sucede; hay que leer mucho, y detalles como una buena tipografía son detalles que mejoran poco a poco un cartucho de más de 25 horas de duración.
Otro de los aspectos que hace para mí muy especial este episodio es su premisa argumental; esa forma de combinar tan bien el presente con el pasado, la cooperación entre Mario, Luigi y Bebé Mario y Bebé Luigi existe en cierto modo, con combos y movimientos distintos pero igualmente graciosos, en ocasiones extravagantes.
Todo esto no es óbice para que el juego siga pendiente del resto de personajes; aunque los protagonistas están muy por encima del resto en carisma y personalidad en sus movimientos, los jefes están muy cuidados, demostrando el gran estado de forma de Alpha Dream, que ya sembró sus pinos en GameBoy Advance y ahora se consumaba como una de las grandes de Nintendo dentro de la segunda división de la misma, sin que esto suene como algo despectivo; nos referimos a los valores de producción, aquí mucho más reducidos y poco ambiciosos que en las oficinas de Nintendo EAD por motivos evidentes.
No obstante, teniendo en cuenta que los recursos son mucho menores, creo que es sin lugar a dudas uno de los diez mejores juegos de Nintendo DS, a la par que el excelente 'Mario & Luigi: Viaje al Centro de Bowser' de tres años más tarde. El sistema de combate requiere un punto aparte, un aliciente de peso para seguir jugando y divirtiéndonos con cada batalla secundaria gracias a la dificultad que aportan los pequeños Bebé Mario y Bebé Luigi, sensacional y divertido, que es al fin y al cabo lo que se busca con esta saga; hacer gracia sin gastar bromas, algo difícil, una virtud.
Habilidad y reflejos deben conjugarse para ver los créditos finales. Finalmente, decir que la curva de dificultad está correctamente conseguida, accesible para todo tipo de jugadores desde el inicio pero complicándose poco a poco; eso sí, no abruma, porque en ningún momento pretende ser endiablado. Es un juego para los más jóvenes, un JRPG que deja la exigencia a otros pero que en su recta final suele hacer eso que tanto le gusta a Nintendo como es pegar un subidón considerable en su dificultad e interés argumental si lo hay. Misma historia para los puzles, que en ocasiones nos harán detenernos y pensar si verdaderamente estamos haciendo las cosas correctamente. Es desenfadado, se siente freso...
Ahora solamente queda esperar a que Nintendo nos traiga 'Mario & Luigi: Viaje al Centro de Bowser' para tener la colección completa en la presente generación de Nintendo, porque el primero de todos ya se unió a la Consola Virtual de Wii U hace unos cuantos meses y el más flojo de la licencia, 'Mario & Luigi: Dream Team Bros', se puede conseguir fácilmente en Nintendo 3DS. Un gran aperitivo para ver de qué son capaces los chicos de Alpha Dream con ese crossiver llamado 'Mario & Luigi: Paper Jam', que podremos disfrutar en nuestras portátiles estereoscópicas en algún momento del próximo año 2016, una combinación lógica entre dos sagas que pedían a gritos una inyección de vida para abandonar ese cierto estancamiento.
Desde que me lo pasé en su momento para Nintendo DS no volví a recuperar esta obra, y las sensaciones han vuelto a ser excelentes; no es una pieza sobresaliente, pero sí imprescindible para cualquier usuario de Nintendo DS y Wii U. El tiempo no ha pasado para él, ni a nivel técnico ni jugable, porque en su momento hizo bien el trabajo, marcando las pautas para el devenir de la saga, que afortunadamente sigue coleando en 3DS. Totalmente recomendado.