¿Hablar de un mando en vídeo? De acuerdo, es interesante. Entretenido. Tú te diviertes viéndolo, y yo comentando mis impresiones. Por eso lo hice hace un par de días. Sin embargo, escribir el análisis de un mando es algo que no parece tan apasionante. Por esa razón llevo días posponiéndolo. Arrinconando esta tarea entre la enorme lista de cosas pendientes que tengo que hacer. Pero, aquí estoy. ¿Por qué? Porque, si bien a mí me puede parecer divertido hablar die-ci-sie-te minutos en un vídeo de un mando de control, puedo remotamente llegar a comprender que existen, en algún lugar, congéneres a los que esto no les parece tan apasionante. Así que, aquí estoy, quejándome, y dando paso a un texto sobre un mando maravilloso, por otro lado, como es el Mando Pro de Nintendo Switch.
Lo más interesante del Mando Pro de Nintendo Switch, al menos lo más interesante en su concepto, es que es un mando opcional, que en cuanto lo tienes entre manos se desvela como un mando premium. Por acabados, por duración de la batería, por la calidad de los materiales... todo hace de él un mando que quieres tener en tu sala de estar, pero, en realidad, no resulta en absoluto necesario para jugar a Nintendo Switch. Es un capricho, en el fondo. Así lo veo yo. Pero uno de esos caprichos que da gusto pegarse.
1 - Ergonomía
La ambición primaria del Mando Pro de Nintendo Switch es ofrecer al jugador una experiencia de juego tradicional. De hecho es un mando muy similar al mando de Xbox One, y esto, teniendo en cuenta lo maravilloso del mando de la consola de Microsoft, es todo un halago.
En este sentido, tenemos un mando que sentiremos rápidamente reconocible entre las manos, con un peso adecuado -superior, en este caso, al del Mando Pro de Nintendo Wii U-.
Además, tiene un par de detalles que me han gustado. El primero de ellos es el hecho de que la superficie sea mate, de tal forma que no dejan huella nuestras manos tras el uso. En segundo lugar, las agarraderas tienen un tacto gomoso diferente al del cuerpo del mando, y, además, están microperforadas, lo que genera una sensación agradable. Por otro lado, los sticks del mando -aunque sea un burdo extranjerismo, prefiero cortarme los dedos pulgares antes que llamar a los sticks "setas"- tienen unas pequeñas líneas en los bordes para facilitar el agarre.
2 - Botones
Probablemente la primera vez que uno tiene el mando perro de Nintendo Switch entre manos, el mando formado por los dos Joy-Cons en el Grip, tiene la sensación de que es un mando pequeño. Pequeñas sus agarraderas, pequeños los botones y pequeños los sticks. En un par de sesiones de juego me adapté sorprendentemente bien al mando perro, a decir verdad, y no me parece en absoluto algo incómodo, ni mucho menos. Sin embargo, en cuanto tienes el Mando Pro de Nintendo Switch sobre las manos recuerdas de nuevo lo pequeños que son los botones y palancas de los Joy-Cons. En este caso, los botones de acción son particularmente grandes, más grandes que los de los mandos de Xbox One, sin que esto sea nada bueno o malo.
Lo que sí resulta interesante es el hecho de que el mayor tamaño de los sticks del Mando Pro de Switch, como ya señalaba mi compañero Carlos Tarrés, facilita los movimientos precisos al aportar un recorrido más largo. En este caso, será muy interesante para juegos como Splatoon, y otros shooters que estén por venir. No obstante, los sticks del Mando Pro de Nintendo Switch diría que están un paso por detrás de la precisión que aportan las palancas analógicas del mando de Xbox One.
Respecto al resto de botones sólo cabe mencionar algo estructural en lo que es todas las opciones de control de la consola, que Nintendo mantiene de Nintendo Wii U, y es el hecho de que no tiene gatillos. Los botones superiores, ZR y ZL son botones con forma de gatillo, pero botones. No hay recorrido.
3 - Batería
Sin duda, en torno a la batería Nintendo sienta un nuevo precedente, tanto con el Mando Pro, como con los Joy-Cons. La duración de batería estimada de los Joy-Cons se cifra en 20 horas, y la batería estimada del Mando Pro de Nintendo Switch lo hace en 40 horas. Esto pulveriza cualquier registro de duración de batería de los mandos de PS4 o del Steam Controller. Del mando de Xbox One a este respecto es mejor ni hacer mención, porque sigue funcionando a pilas.
4 - Carga de la batería
La batería tarda en cargarse al completo unas tres horas, e igual que Nintendo Switch, lo hace a través de un cable USB-C incluido. En este caso sólo se incluye el cable USB, sin conector, de tal forma que podemos cargar el mando enchufando al Dock, o conectándolo a la corriente a través de un enchufe USB.
Aquí viene un detalle muy interesante. Al ser USB-C la conexión que comparte consola y mando, con este cable USB-C incluido con el Mando Pro, y si lo conectamos a un enchufe USB de pared, se convierte en un cargador extra para la consola. Tened en cuenta que un cargador oficial de Nintendo Switch cuesta 25 euros.
5 - Características extra
Estas serías las funciones básicas, las más genéricas que se pueden examinar en cualquier mando de control. Sin embargo, el Mando Pro de Nintendo Switch incluye también todas aquellas funciones específicas de la propia videoconsola, de tal forma que tiene funciones de vibración HD, giroscopio, acelerómetro y lector NFC para las figuras amiibo. Además, incluye el botón de hacer capturas de pantalla que también tenemos en el Joy-con izquierdo.
Por otro lado, es compatible con ordenador a través de conexión Bluetooth 3.0, y muy fácil de vincular al PC ya que Windows lo detecta automáticamente. Sin embargo, en la mayoría de los juegos veremos los controles nombrados como 1-2-3-4 para cada botón, en lugar de con la nomenclatura de ABXY.
Precio y conclusiones
El elemento determinante de este mando es el precio, 69 euros de PVP recomendado en España. Apelo a esto como elemento determinante, porque es el único punto que alguien que tenga interés en el Mando Pro de Nintendo Switch necesita plantearse, ya que el resultado del mando es francamente bueno. Nadie que decida pasar por caja se sentirá defraudado cuando lo tenga en las manos.
Ahora bien, reitero que a mí el mando perro de Nintendo Switch me parece una opción de control bastante respetable, por lo que no considero, al menos con el catálogo actual, que el Mando Pro sea una herramienta de obligada necesidad. La mejor idea es probar la opción de control por defecto de Nintendo Switch, experimentar, y si no estás al 100% convencido, entonces debes saber que tienes una opción perfectamente familiar que no te defraudará con este mando premium. Me cuesta recomendar algo de una manera tan abierta y tan tajante, pero lo cierto es que es difícil sacarle fallos a este mando extra que Nintendo propone para su consola. Sigue la línea del Mando Pro que ya tuvimos en Nintendo Wii U, pero en este caso diría que va un paso más allá refinando algunos aspectos determinantes.