Análisis de 'LocoRoco 2 Remastered' en PS4: Originalidad al poder en 4K

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Análisis de 'LocoRoco 2 Remastered' en PS4: Originalidad al poder en 4K

Por Xose Llosa

El 13 de Diciembre 2017 | 01:25

'LocoRoco 2', original de PSP, encuentra un salto gráfico para colarse en el catálogo de PlayStation 4 con una versión de alta resolución.

Pensar en el catálogo de la veterana PSP invoca tres elementos. El primero de ellos, que se trata de uno de los catálogos más versátiles que podemos repasar, aunque quizá no se toma en cuenta tanto como merece. Los otros dos aspectos, que derivan de este elemento de inicio: analizar este catálogo lleva, en primer lugar, a recordar obras de alto presupuesto y acabado de gran producción en la pequeña portátil, juegos como los 'God of War' o 'GTA', y en contraste, fijarse también pequeños grandes juegos como 'Patapon' o el mismo 'LocoRoco'. Pequeños juegos originales de la plataforma y producidos por PlayStation, que ahora se recuperan en PS4 con acabados de alta resolución. En este caso es 'LocoRoco 2 Remastered' el juego que nos ocupa, con resoluciones 4K en PS4, y recuperando la fórmula directa del juego originalmente diseñado por Tsutomu Kouno.

La genialidad de 'LocoRoco' reside en haber sabido adaptar las mecánicas de los giroscopios en una plataforma sin esta tecnología y lograr aprovecharlo en un diseño profundo de niveles. El diseño de 'LocoRoco 2' toma directamente las ideas que podemos encontrar en cualquier juego plataformas en base a giroscopios. PSP no disponía de esta técnica, por lo que en lugar de Mahoma a la montaña, la montaña fue a Mahoma: en 'LocoRoco 2' la pantalla se inclina a través de los botones L1 y R1 (o girando el mando en PS4), por lo que en un televisor también tiene total sentido. Las gotas musicales, los protagonistas de 'LocoRoco', recorren así los escenarios en base a las propias físicas del juego. Bajo la comprensión de esta mecánica, la clave de 'LocoRoco 2' se encuentra en el diseño de los niveles, proporcionando un plataformas profundo e imaginativo que crece en base a un funcionamiento muy básico. Aquí necesitamos referenciar a Tsutomu Kouno.

LocoRoco 2 Remastered

Producción japonesa

Kouno encuentra en la saga 'LocoRoco' su primer proyecto a encabezar. Sin embargo, este joven nombre de los estudios de Sony en Japón venía de trabajar en juegos destacados como 'The Legend of the Dragoon' -ojalá vuelva algún día este nombre-, o 'ICO'. Juegos muy diferentes entre sí, y radicalmente distanciados, en ambos casos, a 'LocoRoco'. Sin embargo, el nexo de unión entre estos proyectos y la trayectoria de Kouno se encuentra en que la labor del creativo siempre se ha visto vinculada al diseño de mecánicas en niveles. Así, es fácil comprender 'LocoRoco' como una idea muy concreta de un creativo que lleva años experimentando con el diseño y planificación niveles. 'LocoRoco 2', como decía, es pura física. Es un juego experimental, que se obsesiona con una idea tecnológica y la trata de llevar a sus últimas consecuencias. En este camino, la gelatinosa cualidad de las gotas musicales genera unos movimientos muy característicos en saltos y desplazamientos.

LocoRoco 2 Remastered

La complejidad creciente nivel a nivel, hasta superar la veintena, responde más a la profunidad creciente de las fases que a la dificultad. Sin llegar a ser especialmente complicado, sabe aportar ideas nivel a nivel prácticamente desde principio a fin. Siempre en base al diseño del escenario, manteniendo unas reglar de control indiscutiblemente sencillas. Me topo con la segunda idea de partida: no sólo toma una mecánica propia de móvil para hacer de ella un juego de consola, sino que muestra que con mecánicas sencillas asociada a teléfonos se puede generar un juego de diseño de niveles cuidado, profundo... a lo grande, a fin de cuentas. Evidentemente, la mecánica sencilla en el desplazamiento del personaje tiene un techo muy evidente en la propuesta, que hace que 'LocoRoco 2' se contenga como un juego original, pero jamás un imprescindible, ni tampoco rompedor o apasionante.

LocoRoco 2 Remastered

'LocoRoco 2' es un título agradable: directo en su mecánica jugable y entretenido. En su momento mucho más llamativo que en 2017, claro. Pero, sobre todo es agradable también en lo visual. El contraste de colores en tonos pastel, con texturas planas y aspecto redondeado, nos sumerge en un ambiente relajante, que conjuga con el contoneo gelatinoso de las gotas. El salto de resolución y la viveza de color es algo que le sienta fantástico. Lo más interesante es que estos diseños visuales sencillos, como el de 'Patapon', aguantan el paso de los años sin despeinarse. Como siempre, el apartado artístico prevalece sobre el músculo tecnológico. También importante lo artístico en el apartado sonoro, que en este caso se compone de melodías muy importantes al integrarse con el progreso de niveles y ritmo de juego, y contar con minijuegos rítmicos.

LocoRoco 2 Remastered

Conclusión

'LocoRoco 2 Remastered' se mantiene estrictamente fiel al juego original, con un salto de resolución que le siente muy bien en su diseño visual. Original es el mejor adjetivo para la obra de Tsutomu Kouno, que sigue sintiéndose como un plataformas directo y relajante. La limitación evidente que supone reducir el grueso del juego al desplazamiento simplemente girando la pantalla, se trata de paliar en base a la complejidad en el diseño de escenarios y situaciones. Concluye en una apuesta por la variedad, envuelta en un estallido colorido y condicionado por el contraste. Hace de su apartado visual su primer valor, ante el que es difícil no caer rendido en esta alta resolución. 'LocoRoco 2 Remastered' es, sobre todo, un juego fruto de la faceta más experimental de Sony en Japón.

8,0

Lo mejor:

- Vuelve a la actualidad uno de los plataformas más originales de PSP.

- El salto de resolución, y sobre todo la posibilidad de jugar en un buen televisor, logra colores muy vivos que le sientan muy bien.

- Un juego hace del diseño de niveles su núcleo, y logra ser variado y original.

Lo peor:

- Limitado en mecánicas.

- No es excesivamente largo, ni mucho menos presenta un reto importante.

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