Es viernes y suena la sirena: han terminado las clases y ya somos libres. Ese momento es algo que todos los estudiantes hemos deseado durante nuestra infancia y adolescencia inevitablemente, pues ello significa que el fin de semana está ahí, frente a nosotros, esperándonos con nuestros duros quehaceres habituales, ¿verdad?
Había muchos Pokémon que intercambiar, muchas partidas que pasarse con nuestros amigos y muchos goles que marcar en el parque; cada uno a su manera, pero todos coincidiríamos en que una compañía como Level-5 habría sido algo increíble en los 80 ó 90, porque son expertos en eso de dar con el clavo en todas y cada una de las licencias que se atreven a crear especialmente en consolas portátiles.
Su currículum les abala: hablamos de 'Inazuma Eleven', 'Profesor Layton', 'Ni No Kuni', 'Dark Cloud', 'Dragon Quest IX', 'Yo-Kai Watch', 'Attack of the Friday Monsters'... También hablamos de 'Little Battlers Experience', que tras su paso por PSP en Japón y posterior adaptación a Nintendo 3DS llega ahora a nuestro territorio en exclusiva para Nintendo 3DS. Como podréis imaginar, durante este par de decenas de horas que me ha llevado completar 'LBX' (abreviatura con la que podemos dirigirnos a este título) me he sentido una vez más como un niño, atrapado ante una experiencia única, que no rompe moldes pero que tampoco lo busca, porque su misión principal, que es la de trasladar la experiencia de una serie de animación en una fórmula que todos querríamos poder recrear en la vida real, está lograda con creces. Conozcamos un poco más de cerca 'Little Battlers Experience'.
Level-5 y su idiosincrasia, es real
Se estaba haciendo de rogar, pero por suerte ya lo tenemos aquí; fue allá por 2012 cuando los vecinos del país del Sol Naciente pudieron hacerse con 'Little Battlers Experience Baku Boost', la versión mejorada de la obra original en la portátil estereoscópica, un remake en toda regla con unos valores de producción que sorprende lo bien que se han adaptado con el paso de los años, y es que no da la sensación de ser uno de los títulos de primera hornada en la máquina de Nintendo. Level-5 apuesta una vez más por Occidente y lo hace con una serie de animación y manga que se podrán disfrutar también en España.
Ya se sabe que aquí las cosas van despacio, y aunque ya se hayan publicado tres entregas de la serie, aquí tenemos que conformarnos con recibir ahora la primera. Algo es algo. Viajemos entonces al año 2046, donde se contextualiza esta obra en la que el futuro nos invita a creer en una realidad donde unos juguetes han revolucionado el mercado, haciendo que las juventudes de todo el mundo enloquezcan ante estos robots, algo que se transmite y que llegas a sentir mientras juegas de alguna manera.
Eso sí, se trata de unos juguetes bastante peligrosos y que por sus mecánicas radio control provocaron combates demasiado violentos y con daños que iban más allá del propio juego. Todo esto derivó en una retirada casi inmediata de los mismos. ¿Solución? Unos cuadriláteros de un metro cuadrado aproximadamente capaz de absorber estos ataques, una medida racional y que encaja. ¿Sí? Pues sigamos, que esto no ha hecho más que empezar.
Es ahora cuando se abre ante nosotros el argumento principal del que no os vamos a contar nada más allá de que eres tú, protagonista (Van Yamano), el que tiene que salvar al mundo de unos males que acechan... usando los Little Battlers Experience. La trama está llena de clichés, y la sensación de sorpresa es inexistente; los niños, sin embaego, se verán sumergidos y no lo soltarán hasta saber qué viene después. En mi caso personal puedo dar constancia de que en el grupo de niños que suelo ver a menudo han quedado encandilados con 'LBX'. Algo habrán hecho bien.
Así pues, tras unos cuantos "ve de A a B", decenas de textos en su mayoría irrelevantes y cinemáticas muy bien hechas, es el momento de conocer cómo se juega a este RPG de acción con un componente de personalización y mejora de estos robots de miniatura bastante elevado, demasiado incluso si se ofrece a neófitos en este tipo de juegos. Tal como decíamos, los combates se desarrollan en estos cuadriláteros y en tiempo real; es una lástima que suelan estar bastante vacíos y con algunas texturas muy poco detalladas, pero por suerte todas esas imperfecciones no logran ensuciar el resultado final, porque la lucha se controla a la perfección y los controles son sencillos a la vez que profundos.
Por lo general no tardaremos más de 3 minutos en terminar la batalla; la curva de dificultad es existente e irá creciendo poco a poco, aunque no os esperéis anda del otro mundo porque al final estas batallas son una excusa, el camino, digamos, para que sigas conociendo la historia. Eso sí, una actualización que hiciese compatible el C-Stick de los actuales modelos de la máquina, New Nintendo 3DS y New Nintendo 3DS, le vendría como anillo al dedo. Al haber combates 1vs1 y 3vs3 hay un cierto matiz estratégico muy agradecido especialmente si jugamos con amigos. No quiero dejar de mencionar algo que me gustó mucho como es la sensación de no estar todo ganado (o perdido) hasta el último momento; si consigues hacer buen uso de tus barras de energía y efectuar ataques especiales correctamente, puede que le des la vuelta a la situación cuando ni siquiera tú te lo esperabas.
Si a ello le sumamos unos bastante espectaculares combates contra jefes finales, creo que podemos hablar de un producto muy notable en el apartado jugable y que no se conforma con ser un mero 'Dark Souls' para niños: tiene mucho más. Hay miles (más de 4.000...) piezas para personalizar nuestro LBX, con configuraciones y estadísticas que modificar. No hay dos robots iguales si le echamos un poco de ingenio.
Un menú con todos los nutrientes
El sello de Level-5 se deja sentir desde el primer minuto, con una banda sonora que se te quedará en la cabeza durante días. No te esperes nada espectacular, insisto, Nintendo 3DS no puede dar más de sí, pero los de Fukuoka respetan siempre unos valores de producción que no se sienten en casi ninguna compañía; se toman en serio hasta el más mínimo detalle y quieren que todos sus productos sean igualmente disfrutables hoy, en 2015, como hace una década o en 2046.
El doblaje en inglés está perfectamente interpretado y el nivel de los textos que forman la traducción es excelente, a la altura de lo que nos tiene acostumbrados Nintendo Ibérica. Le falta un modo online o algo más de pasión en el apartado gráfico, pero cuando terminas 'Little Battlers Experience' sientes de verdad haberlo pasado en grande, así que su recomendación queda de sobras realizada; nos deja con muchas ganas de ver los episodios venideros por aquí, una idea que no se antoja descabellada si consigue vender bien en Europa y Norteamérica.
¿Usuario de Nintendo 3DS? Que no se escape de tu radar 'LBX', porque quizá disfrutes con él mucho más de lo que podrías esperar por su estética y los prejuicios que siempre empapan a este tipo de videojuegos. Level-5 lo ha vuelto a hacer, sin superar a los que hemos mencionado anteriormente pero convenciendo de la A a la Z.
Hay que salvar el mundo, y solo tú puedes hacerlo.