Las relaciones nunca son sencillas, ya sea con miembros de la familia o con amigos. En más de una ocasión pueden surgir momentos incómodos y sonrisas forzadas. Sobretodo en el caso de los hermanos con edades tan diferentes como las de Sean y Daniel. La adolescencia no es fácil, dejas de ser un niño para empezar a moverte en el mundo de los adultos. Eres mayor para determinadas tareas, pero para otras sigues siendo un crío. Lo eres todo y nada a la vez mientras sueñas con crecer deprisa. Todo esto, con un hermano pequeño que quiere estar a tu lado y teniendo que ayudar en casa, no es nada sencillo.
Con esto empieza una nueva aventura de 'Life is Strange', que podemos definir con dos palabras: esperas eternas. Esta sería una gran forma de denominar el espacio de tiempo entre el lanzamiento del primer episodio de 'Life is Strange 2' y la quinta y última entrega de la aventura. Quizá eso fue lo que causante de que la historia de los dos hermanos Díaz no impactase tanto o al menos, los seguidores fueran perdiendo el interés con el paso de los capítulos. Pero ahora ya ha llegado a su fin, y podemos ver en conjunto como ha sido su aventura.
La gran aventura
Un día aparentemente normal en el que te despiertas por la mañana, vas a clase y planeas una escapada nocturna para ir a la mejor fiesta del año. El momento de nervios pensando en que llevar y en la magia de la noche, ver a la chica que te gusta y no poder sacártela de la cabeza. Algo habitual en cualquier adolescente. Pero nadie podía planear que el día acabaría con los dos hermanos Diaz huyendo de la casa que fue su hogar por tantos años. Dejando su mundo a un lado para recorrer una larga y dura aventura sin saber cómo terminará y que pondrá a prueba su relación de la forma más estricta posible.
Al contrario que en la primera entrega, nuestro protagonista al que guiaremos a lo largo de los cinco episodios, no tiene ningún poder. Su misión será la de educar a Daniel, su adorable hermano pequeño con más potencial del que ninguno de los dos se esperaba en un principio. Lo único que tenemos de especial en ese sentido, es una gran habilidad para dibujar y retratar determinados momentos de nuestro viaje en una libreta. Esto hace que las decisiones no sean tan sencillas, ya que no podemos rebobinar el tiempo y además no es algo que afecte a nosotros solos. Tenemos a un pequeño a nuestro cargo al que debemos educar y proteger de lo que pueda pasar.
Decisiones complicadas
Dejando de lado este cambio que puede no ser del agrado de todos, no podemos olvidar la esencia del título y es que sus decisiones son la parte más importante para el jugador. Nosotros tenemos el poder de decidir que pasará a continuación, cómo actuar y cuál será la personalidad de nuestro personaje. Aunque en esta nueva entrega se nota aún más que este poder de decisión es más una ilusión que un poder propiamente dicho. Quitando algunas decisiones un poco más trascendentales, la mayoría son un simple rodeo que da el juego para acabar en el punto acordado. Un falso poder de decidir que en muchas ocasiones es irrelevante.
Esto ya lo vimos en 'Life is Strange: Before the Storm' pero por motivos obvios ya que la historia ya estaba creada. En esta ocasión había más libertad que aunque atrayente, parece desaprovechada hasta cierto punto. Eso sí, las decisiones son dura y complicadas, más de lo esperado. En más de una ocasión conseguirán que te metas en la piel de Sean y se te haga un pequeño nudo en la garganta ante sus escenas. Un adolescente sin recursos, huyendo de su hogar y con un niño especial a su cargo. Deberemos tener la mente fría y dejar de lado nuestros sentimientos para poder salvarnos a nosotros mismos y a Daniel.
A la vez y para conseguir un mayor impacto, como es habitual tendremos un juego de planos excepcional, como si de una película se tratará. El peso de las imágenes y las cinemáticas en esta entrega es de gran importancia, siendo de gran apoyo para su fuerza narrativa. Seguramente sea debido a que hay muchos espacios donde nos limitamos a sentarnos y ver lo que está pasando que para coger el mando y jugar propiamente dicho.
Llegando al corazón
La conexión de ambos hermanos al inicio de la aventura es escasa, aunque una mezcla de miedo y necesidad les une cada vez más. No les queda más remedio que empezar a ser sinceros entre ellos y conocerse. Uno de los puntos más positivos de la obra es, sin duda, la progresión de ambos personajes y ver cómo se van adaptando poco a poco a cada nuevo reto que se les presenta en el camino, y no son pocos. No atrapan como Max, Chloe y compañía, pero saben cómo conquistarnos. Quizá esto sea debido a que la historia de Sean y Daniel se sale de lo común en muchas ocasiones y su situación es muy diferente. No son como el resto, han vivido situaciones extremas que les hace ser más fuertes.
Pero no estarán solos en prácticamente ningún momento. Ya sean unos personajes secundarios u otros estarán presentes. Empezando por Lyla, la mejor amiga de Sean y el amor de Daniel de la que no sabemos mucho, pero que sin duda es importante para ambos. Como ella muchos son los amigos o conocidos que aparecen, pero raro es el personaje que se convierte en recurrente. Esto es normal teniendo en cuenta que están emprendiendo un largo viaje ellos dos solos, pero no deja espacio a conocer a fondo a ninguno de ellos y es una gran oportunidad perdida para reforzar sus relaciones y conocer más sobre su casting.
Además, la historia gana importancia cuando descubrimos el trasfondo de cada decisión y cada nueva situación. El racismo es uno de los temas de actualidad que más afectan a nuestros personajes de padre mexicano y que harán que su aventura sea un poco más complicada cada vez. El resultado de ello son duras escenas que supondrán un gran golpe de realidad y que nos transmiten todas y cada una de las sensaciones y emociones que están viviendo miles de personas.
Emotivo e intenso
En resumen, 'Life is Strange 2' trata temas y relaciones complicadas y muestra una realidad distinta a la que estamos acostumbrados. Consiguen transmitir a la perfección lo que viven los protagonistas y hacen que sea sencillo entender su forma de pensar, pero a la vez se echa de menos a las carismáticas Max, Chloe o Rachel. Son historias muy distintas entre ellas, pero sus personajes no han conseguido lo mismo que esas jóvenes chicas. Al igual que pasa con sus personajes secundarios a los que no nos da tiempo a conocer a fondo.
Por otro lado, la distribución del tiempo y la duración de cada episodio puede jugar en su contra. Demasiados momentos de sentarse y observar frente a los escasos momentos donde nosotros decidimos el rumbo del juego. Aunque también es importante para poder transmitir tanto como lo hace, al final consigue que la aventura se haga cuesta arriba en algunos momentos. Pese a todo, la historia invita a descubrir más y es una aventura que merece la pena vivir y que logra transmitir más de lo esperado con una historia profunda y complicada.