Análisis de 'LEGO DC Súper Villanos' para PS4, sienta bien ser tan malo

Admitámoslo: a la sociedad moderna le encantan los tipos malos. Ya sea con antihéroes que buscan su propio interés o con antagonistas atractivos y con canciones pegadizas, nos encanta pasar un buen rato con algunos de nuestros villanos favoritos. Hay películas a su alrededor, adaptaciones e incluso reimaginaciones para mostrar que, después de todo, quizás no sean tan malos. Sólo tenemos que darles una oportunidad para que dominen el mundo y muestren su cara más amable. Es ese atractivo por el que ha apostado TT Games en 'LEGO DC Súper Villanos'.

En vez de aliarnos con los clásicos héroes de turno y protagonistas de cualquier enfrentamiento por un bien superior, los desarrolladores de los juegos de los bloques de juguete han decidido dar un golpe de aire fresco colocándonos frente a la destrucción y la representación del mal. Aunque claro, como no podía ser de otra forma, al final no son tan malvados y hacen un bien mayor. Aunque sea para después conquistar el mundo ellos mismos.

Libre para hacer el mal

La historia de 'LEGO DC Súper Villanos' no se corta lo más mínimo en dejar claro desde el principio que esta es la cuarta entrega de la saga que hasta ahora protagonizaba Batman. Tras la caída de Brainiac el universo puede darse un momento de respiro, pero la amenaza siempre acecha y esta vez llega por sorpresa para la Liga de la Justicia: su versión antagonista de Tierra 3, un mundo paralelo, llega para suplantar a los héroes y preparar la llegada del villano más terrible de todos a nuestro planeta. Ahora es el turno de la Legión del Mal para dar un paso adelante y rechazar la amenaza, liderados por el nada bien intencionado Lex Luthor.

Desde el principio se nos agregan personajes icónicos de la selecta galería de seres malvados de DC Comics, como el carismático Joker doblado por Mark Hamill, Flash Reverso o Deathstroke entre muchos otros. La gran mayoría de personajes jugables son enemigos desde famosos como los propios héroes hasta algunos más oscuros que siempre es agradable conocer. Hay un pequeño espacio para héroes, pero no llegan a superar un cuarto de todo el elenco: todo un acierto para dar más poder a los villanos, tal y como merecen. Tampoco hay personajes desbloqueables innecesarios, como matones o ciudadanos de relleno.

Aunque por extraño que parezca el personaje al que más importancia no será ninguno de los carismáticos villanos de la inmensa galería a nuestra disposición, sino el personaje al que nosotros creemos. La personalización del protagonista nunca había tenido tanta importancia en la franquicia como ahora, donde se nos pide desde el primer momento crear nuestro propio personaje y elegir sus poderes. Sus capacidades crecen a medida que avanzamos en la historia, podemos personalizar su aspecto a medida que conseguimos más personajes e incluso tiene su propia miniatura en la pantalla de selección de personajes junto con los demás. Nunca habla, pero desprende una gran personalidad siempre que lo tenemos en nuestro control; y lo más importante, su adición no da nunca la sensación de ser un añadido forzado. Hay capítulos en los que no estará presente, además de que su papel hacia el final se refuerza argumentalmente.

Un mundo chiquitín

No es que la historia de los juegos de 'LEGO' haya sido nunca el punto fuerte, pero existe un problema importante en la de esta entrega. Los primeros capítulos empiezan con fuerza y los últimos son estupendos, pero hacia la mitad de la partida parece que los guionistas hayan querido añadir relleno para cumplir con el número de niveles final: cuatro o cinco de los capítulos jugables están de sobra, siendo simplemente momentos en los que vamos a reclutar más villanos y alargar la vida útil del juego. Cumple al estar ubicados en localizaciones que los fans de los comics disfrutarán especialmente, pero paralizan el desarrollo del argumento de forma innecesaria.

También es cierto que el juego tiene un antecesor importante frente al que estar a la altura, lo que habrá forzado esta decisión de cara al producto final. El lanzamiento al mercado de 'LEGO Marvel Super Heroes 2' ha dejado el telón muy alto a la hora de ofrecer contenido a los jugadores: un mundo gigantesco basado en diferentes distritos, veinte niveles base y luego los adicionales. En números, 'LEGO DC Súper Villanos' no llega a alcanzar ese esplendor: quince niveles de base y cinco adicionales, y un mundo dividido en apenas dos ciudades más un lugar secreto para cuando terminemos el juego. Es una aventura más concentrada y que sabe dónde acertar para encantar a los jugadores, pero se siente más pequeña en comparación.

Y eso no es malo. Que nadie se lleve las manos a la cabeza pensando que es un juego inferior por ello, nada más lejos de la realidad. El hecho de que se hayan centrado en algo más pequeño lleva a que haya más mimo y cuidado con cada uno de los niveles. En este aspecto se puede agradecer especialmente el hecho de que el número de minikits por fase haya sido reducido de diez a cinco, permitiendo que nos centremos más en los objetivos secundarios y que cada uno de ellos se sienta especial y planteado metódicamente.

Sin cambios no hay planes

Lo cierto es que más allá de la historia y los protagonistas no hay grandes novedades con respecto a otros juegos de 'LEGO' en esta ocasión. TT Games no suele renovar la fórmula en gran medida entre sus títulos, introduciendo pequeños cambios a cada juego que desarrollan que se ven a lo largo del tiempo cuando se establecen como mecánicas principales en los siguientes juegos. En ese sentido, 'LEGO DC Súper Villanos' quizás sea el título más continuista de toda la franquicia, pues no incluye prácticamente nada que no hayamos visto antes: lo único que destaca es la presencia del personaje personalizado durante la campaña.

Este es sin duda el gran punto flojo del juego. A este analista le encantan los juegos de los ladrillos daneses, y por eso mismo aprecia los cambios realizados por cada juego pues evolucionan hacia una experiencia más completa cada vez. Las secciones shooter de 'El Despertar de la Fuerza' o la acción hack 'n slash de 'La LEGO Ninjago Película: El Videojuego' son fuertes ejemplos de ello. Por algún motivo los desarrolladores han decidido conformarse con las bases ya establecidas y no añadir nada a la fórmula, lo cual está bien por ahora pero resta valor a esta entrega, lo que no enamorará a aquellos que no fueran fans de esta clase de juegos de por sí.

Conclusiones

'LEGO DC Súper Villanos' es sólido y una gran experiencia de la que disfrutar tanto solo como en compañía, pero su potencial está retenido por negarse a evolucionar la fórmula y ofrecer mecánicas nuevas a los fans de TT Games. La capacidad de ser malvados podría haber permitido nuevas características como destruir ciudades o conquistar mundos, pero en lugar de eso decide seguir la misma fórmula que el resto de juegos de la franquicia y conformarse con ser sólo un buen juego. La lección es que hasta los villanos más carismáticos son conformistas una vez se hacen con el control del mundo, reemplazando sólo la figura de poder previa.