Análisis de 'Hitman' Episodio 2 - Sapienza: lo mejor del Agente 47 se deja ver en la costa mediterránea

Tras el controvertido estreno del Agente 47, era muy necesario un segundo episodio como este, ambientado en la ficticia ciudad italiana de Sapienza. Da la sensación incluso de que tanto en IO Interactive como en Square Enix vieran venir las dudas que iba a generar el primero y por ello, quisieran dejarnos a continuación algo mucho mejor para hacernos ver que el tono que está cogiendo este nuevo 'Hitman' episódico brille un poquito más. Con esta misión al borde del mediterráneo tenemos uno de los mejores momentos del personaje, uno de esos que a mi me hacen recobrar las esperanzas en este videojuego.

Un escenario magnífico

Lo primero que hay que resaltar es que, probablemente debido a la ambientación, el apartado técnico luce muchísimo mejor en este segundo episodio. El primer escenario principal es la localidad costera de Sapienza, un entorno muy bello y ambientado fantásticamente bien, donde en cada calle y cada esquina se respira el ambiente de una villa turista para gente pudiente: tiendas de ropa de lujo, restaurantes, cafeterías a pie de playa, etc... El diseño del nivel nuevamente vuelve a ser genial, con una amplitud sorprendente y que vale la pena recorrer, no solo por simplemente contemplarla, sino por la presencia de oportunidades y pistas para colarnos en el segundo escenario, que es donde el Agente 47 perpetrará su misión.

El grueso de esta se desarrolla en una enorme parcela de terreno donde la mansión es el edificio principal, pero en la que vamos a encontrar también el jardín, la cocina, la bodega, un campo de golf... La mansión no tiene el tamaño del palacio del episodio de París, pero también su diseño vuelve a ser muy, muy bueno, con muchísimas oportunidades para asesinar, ocultarnos, distraer al personal, etc... Nuevamente, las posibilidades para ejecutar la misión son múltiples.

Esta es el asesinato de Silvio Caruso y Francesca De Sanctis, empresario y científica respectivamente, y a cargo de una empresa de nombre Ether que está desarrollando un virus letal. La misión no termina con el asesinato de ambos, sino que también hay que destruir dicho virus, de hecho, Caruso puede caer fácilmente a los apenas 10 o 15 minutos de haber comenzado, pero es entonces cuando se amplían las opciones y este segundo episodio luce aún mejor.

Probablemente pueda pecar de ser algo más sencillo que el capítulo parisino, ya que la cantidad de NPC es menor -y su IA suele hacer aguas a menudo-, y es que nos encontramos en una propiedad privada, no en un evento público, pero se disfruta mucho más porque las posibilidades son mayores y más imaginativas. Esto viene a consecuencia de las Oportunidades, mucho más inspiradas, pero que también, como contrapartida, hacen el recorrido algo más lineal.

Esta linealidad se corrige con algunas actividades opcionales donde la recogida de información sobre Ether es la más interesante a nivel argumental y donde las menos serán los desafíos que propone el juego para completistas. A pesar de no ser uno de ellos, he de confesar que esta fase me ha hecho darle un par de vueltas más y explorar otras opciones, no para ver todo lo que ofrece de cara a esta review, sino porque de verdad el juego invita a ello. IO Interactive ha puesto todos los esfuerzos por hacer de esta escaramuza italiana una experiencia que vale realmente la pena para fans del personaje.

Sería totalmente injusto juzgar este segundo capítulo solo en base a una vuelta. Localizaciones, disfraces, herramientas cualesquiera que en manos del Agente 47 se convierten en armas letales,etc... La impresión que deja no es la misma tras completarlo por primera vez -que ya es buena-, tras la tercera -que es aún mejor-, y al igual que en el primer episodio, la rejugabilidad vuelve a ser una virtud. No es la rejugabilidad sobrevalorada de hoy en día, que consiste básicamente en hacer exáctamente lo mismo con un nivel mayor de dificultad, no. Aquí hablo de rejugarlo para algo completamente diferente a lo que has visto antes.

IO Interactive endereza el rumbo

La impresión que deja este episodio de Sapienza es realmente buena, de que ha mejorado en todo al capítulo previo de París. Sigo teniendo la sensación de que este estudio danés no tuvo más remedio que pasar por el aro de Square Enix al hacerlo episódico y no tener los valores de producción que seguramente ellos esperarían, pero lo que es seguro es que su esfuerzo por hacer un buen juego es innegable. Sin embargo, las dudas acerca del peso del argumento -aquí tenemos una breve escena al final que no clarifica mucho- y de la cantidad de contenido que nos vamos a encontrar cuando la "experiencia completa" llegue a su fin siguen ahí. Por el momento lo que sí se puede decir es que esto pinta mucho mejor que hace poco más de un mes.

Al igual que dejamos claro en el texto del primer episodio, tampoco en esta ocasión pondremos nota. Creemos que lo más justo para el juego y vosotros, los lectores, es esperar a que el juego esté de verdad completo y juzgar una experiencia por su global, más que cada parte por separado.