Análisis 'Hearts of Stone', expansión de 'The Witcher 3: Wild Hunt'

Con productos como 'Hearts of Stone', la nueva expansión de 'The Witcher 3: Wild Hunt', puedes darte cuenta de que los contenidos DLC que pagamos aparte del juego completo pueden servir para algo más que para levantar odio entre algunos aficionados a los que, evidentemente, no les gusta tener que pagar cada dos por tres por nuevos contenidos para poder disfrutar de una obra al completo.

Porque 'Hearts of Stone' se siente como una obra totalmente independiente. Sí que necesitamos el juego base de 'The Witcher 3: Wild Hunt' para poder utilizarlo, y sí que se sitúa en un contexto posterior a lo que se nos narra en la historia del título principal, pero funciona perfectamente como un contenido que cuenta con su propia introducción, nudo y desenlace.

Complementa, pero no completa.

Obviamente, la importancia de la propia trama en 'The Witcher 3: Wild Hunt' se ve reflejada en la expansión, por lo que no aportaremos mucha información acerca de ella. Uno de los aspectos que caracterizaba al juego en su momento y que también se ve reflejado en 'Hearts of Stone' es el mayor peso de la narrativa respecto a la propia jugabilidad. De hecho, los que hayáis jugado al título estaréis de acuerdo en que pasamos mucho más tiempo entre conversaciones, decisiones y secuencias que entre combates.

La evolución de CD Projekt RED

Pero sí que es cierto que se nota una evolución en el propio estudio, CD Projekt RED, a la hora de plantear muchos de los contenidos de 'Hearts of Stone' respecto a 'Wild Hunt'. Por ejemplo, lo encontramos en las propias secuencias cinemáticas y en las secuencias de conversaciones donde nosotros volveremos a interpretar a Geralt de Rivia. Mejor tratamiento de la fotografía y de los planos, que quizás se sentía algo más estática en el juego principal.

Para que lo entendáis mejor, seremos testigos de un mejor aprovechamiento de los bellos paisajes del mundo del juego a través de una mejor colocación de las cámaras, que también nos permitirán ser testigos de más planos que los utilizados en el juego principal, sobre todo a la hora de mostrar las conversaciones (que eran muy planas, y nunca mejor dicho). También dará la sensación, por estos mismos motivos, que los paisajes están algo mejor aprovechados.

Hablando de escenarios, sí que es cierto que se han ampliado mínimamente los que ya estaban en 'The Witcher 3: Wild Hunt', aunque con nuevas zonas muy concretas y poco importantes en general. Quizás es una de las pocas cosas que se le pueden achacar a 'Hearts of Stone': aparte de la nueva y estupenda historia, no aporta muchos más elementos que amplíen lo que ya teníamos con el juego. Pero ya os digo que merece y mucho la pena por la nueva trama.

Una historia que funciona de forma independiente

La novela 'El último deseo', la primera que narra las aventuras de Geralt de Rivia, en realidad no contaba una historia correlativa, sino que nos presentaba al brujo y a diversos personajes a través de historias que no tenían por qué estar correlacionadas entre sí. Esto deja bien claro que el mundo de 'The Witcher' es perfectamente adaptable para este tipo de expansiones, que como os he dicho antes no amplían la trama contada en el juego principal sino que crean otra historia con sus propias características.

Eso es lo más destacable de la historia que se nos narra en 'Hearts of Stone', ya que es capaz de presentarnos a nuevos personajes (y a traer de vuelta a otros tantos) pero que plantean nuevos retos, nuevas situaciones y hacen que volvamos a sentirnos dentro de otro 'The Witcher' completamente diferente. No es tan especial ni tan espectacular como la importante búsqueda que debe realizar Geralt en el juego principal, pero tampoco es necesario para que nos metamos de lleno en la historia y deseemos conocer su desenlace.

Los personajes elegidos para la ocasión (tres de ellos, de forma especial) están perfectamente construidos y ayudan a generar esos momentos memorables que seguramente sigamos teniendo cuando recordemos al juego. Tiene todo el sentido del mundo que CD Projekt RED haya decidido lanzar estas expansiones (primero 'Hearts of Stone', pero queda una más) también en formato físico, como si se tratara de un elemento y un producto propio más allá de ser un simple añadido.

Las conversaciones y sus decisiones

Por supuesto, la rejugabilidad con la que contaba el propio 'The Witcher 3: Wild Hunt' sigue estando presente en 'Hearts of Stone' y podremos variar completamente el devenir de los acontecimientos. Seguro que te apetece (si tienes tiempo) repetir la experiencia probando otras decisiones. Casi todas llevan a distintas secuencias cinemáticas y distintos desarrollos. De hecho, puede que incluso visites (o dejes de visitar) alguna que otra zona por estas decisiones.

Sigue habiendo contenido secundario, pero no tantísimo como en el juego principal. Existirán algunas misiones secundarias con la misma profundidad que hicieron excelentes y muy características a las vistas en 'Wild Hunt', y nos apetecerá realizarlas todas. Además, el estudio ha tenido a bien que estas nuevas secundarias también tengan que ver un poco con la nueva historia que se nos narra, lo que aporta un punto más de personalidad propia al producto.

Son varias horas de contenido (10 como mínimo, y si vas muy directamente a cumplir todos los objetivos principales) y es una auténtica delicia volver a sentirse parte de este hermoso mundo. Además, gracias a la actualización 1.10 (más de 17 gigas, eso sí) la fluidez del juego ha mejorado y no seremos testigos de tantas bajadas de frames, ni de tantos bugs, aunque siguen estando presentes. El apartado gráfico también ha recibido una pequeña capa de pintura (mejores texturas y color) que hacen que sea algo más disfrutable en todos los sentidos.

Quizás se fuercen algunas situaciones, al igual que ocurría en 'The Witcher 3: Wild Hunt', creando batallas contra enemigos cuando realmente no tienen demasiada coherencia o lógica, pero claro, aquí ya entramos en un asunto muy subjetivo. Es entendible que, por mucha importancia que se le dé a la narrativa, el título sigue siendo un RPG y Geralt debe poner a prueba sus habilidades y nuestras mejores en combate contra otros enemigos. A destacar, al menos, los enemigos finales que nos encontramos en 'Hearts of Stone', con mejores diseños y más contextualizados que en el juego principal.

Un DLC ejemplar

CD Projekt RED ha evolucionado respecto a lo mostrado en el ya excelente 'The Witcher 3: Wild Hunt' con 'Hearts of Stone', permitiéndonos disfrutar de unas pocas horas más de una estructura de juego que ya habíamos visto. Hay más 'The Witcher 3' en 'Hearts of Stone', además, con apartados mejorados (como la dirección, la fotografía, los enemigos finales...) por lo que no queda más que decir que es un auténtico imprescindible para cualquier jugador que disfrutó mucho con el juego principal. El precio, desde luego, va más que acorde con la calidad y la duración de un producto que podría pasar por independiente, de forma excelente.

'Hearts of Stone' es un DLC ejemplar. Y muchos deberían tomar nota de lo que aporta: más contenido que complementa pero no completa el juego principal, con una evolución palpable en muchas características. Quizás alguno eche de menos algo más de contenido aparte de la nueva (y genial) historia, pero a nosotros nos ha parecido más que suficiente como para recomendarlo a aquellos que disfrutaron de lo proporcionado por 'Wild Hunt'.