CORRE Y RECOLECTA

Análisis de 'Harvest Moon: Mad Dash' para PS4, aventura sin pausa

Analizamos 'Harvest Moon: Mad Dash', la última aventura de la saga en la que viviremos situaciones al límite en una historia muy distinta a la que estamos acostumbrados.

Por Sandra García 15 de Noviembre 2019 | 15:30

En más de una ocasión, cuando pensamos en un juego de simulación de granja, siempre se nos viene a la cabeza una aventura relajante en la que pasar varias horas de tranquilidad absoluta cuidando nuestras plantas y a los animales. En el peor de los casos tendremos que apurar al máximo las horas del día y nuestra energía para llegar a tiempo a todo o preparar algún concurso en la plaza mientras intentamos conquistar a nuestro amor platónico. Así que si pensáis que 'Harvest Moon: Mad Dash' se trata de una tranquila aventura; ya podéis ir eliminado esa idea de la cabeza.

La idea no es una novedad total: 'Puzzle de Harvest Moon' llegó hace más de 10 años a Nintendo DS. En 2007 para ser exactos vió la luz y pese a no llegar a Europa, contaba con un formato muy similar al último título de la saga. Un campo de cultivo, poco tiempo y muchos objetos con los que interactuar. Dejamos atrás los títulos anteriores y demos paso a una aventura muy distinta a la habitual con unos personajes que seguro que os resultan familiares. ¿Listos para descubrir una visa en la granja algo diferente?

Desenfreno en la granja

¡Un nuevo 'Harvest Moon'! Seguramente esta ilusión la compartieron muchos seguidores de la saga después de la decepcionante entrega de 'Harvest Moon: Light of Hope Special Edition', justo anterior a esta. Y al ver el contenido del título, la historia se repite. Una aventura frenética en la que olvidamos todo lo aprendido sobre la saga y tan solo contamos con un pequeño campo de cultivo donde hacer todas las operaciones necesarias para ganar. No tenemos una casa, los días no van pasando, no tenemos que relacionarnos con los habitantes... ¿qué está pasando? Simplemente es un juego de rompecabezas como los hemos visto miles de veces, con la diferencia es que esta vez se han colado entre sus filas los personajes, objetos y habilidades más típicas de 'Harvest Moon'.

La historia, igual que pasó con la anterior entrega de Natsume, es prácticamente inexistente. Unos pocos minutos son los que han dedicado en esta ocasión para ponernos en situación. En resumen, toca volver hasta donde está el faro y comprobar lo qué está pasando para que de golpe toda la isla se haya convertido en una jungla. Para ello iremos corriendo de un lado para el otro para conseguir semillas para la diosa y que nos solucione el problema. Unos segundos después ya nos encontramos en plena partida.

Aparecemos en un mapa no muy extenso con una casa en el inicio y muchas plantas por delante como si fuese una auténtica jungla. Iremos avanzando casilla por casilla hasta llegar a nuestro destino, el faro. A medida que avanzamos, el mundo se irá mostrando de forma adorable y divertida dejando ver conocidos escenarios de la saga. Cada casilla cuenta con un máximo de tres estrellas que podremos conseguir si alcanzamos la puntuación adecuada y sin ellas no desbloquearemos el siguiente tramo del camino. ¿Os resulta familiar este formato de juego? Muy similar a los tradicionales juegos de móvil llenos de niveles en el que tenemos que repetir una y otra vez una pantalla para progresar.

¡Sálvese quien pueda!

En esta ocasión, en cada nivel tendremos una serie de retos que se pueden resumir en agrupar cultivos del mismo tipo, pescar peces de la misma especie o dar de comer a los diferentes animales que aparezcan, todo formando cuadrados para multiplicar nuestros puntos. De esta manera conseguiremos más estrella para avanzar y estar un poco más cerca de nuestro objetivo. Aunque el formato en una consola de sobremesa es extraño, no deja de ser una entrega entretenida, pero que no se adapta como debería. ¿Imagináis jugar a Candy Crash en PlayStation 4? Sin duda es una apuesta curiosa y hasta cierto punto demasiado arriesgada incluso para Natsume.

No todo será tan sencillo, las cosechas se pueden marchitar, los peces se escapan y los animales se duermen después de darnos su producto. Sobretodo por los dos primeros puntos, se hará una auténtica carrera contrarreloj conseguir hacer las formaciones que nos van pidiendo. Entre que no dejan de aparecer nuevas casillas con objetos al azar o que antes de lo previsto se marchitan las hortalizas y los peces deciden irse a otro lugar, no dejaremos de correr de un lugar a otro.

Pero los problemas no quedan solo en eso, en algunas pantallas irán cayendo cocos que acabarán con lo que haya en esa casilla, jabalíes que recorren el campo de cultivo de lado a lado destrozando todo a su paso o incluso lava o hielo cayendo del cielo. Dependiendo de si nos encontramos en la granja, la playa o incluso el inframundo encontraremos unos u otros objetos. Algunos efectos adversos que sumarán un poco de dificultad a esta frenética aventura hasta el punto de acabar con la paciencia de alguno en más de una ocasión. Mientras esquivamos todos estos problemas, contaremos con varios pequeños objetivos que nos darán un plus en nuestra misión, algunos tendrán un tiempo limitado y otros no, pero todos serán importantes para acabar con éxito la partida.

Una ayuda nunca está de más

Ya sea en solitario o en compañía, siempre va bien tener una pequeña ayuda. En este caso, hasta cuatro jugadores pueden entretenerse con estos escenarios de rompecabezas tan curiosos, aunque solo en modo local. Aunque con una sola persona es más que suficiente para superar el nivel, así que con más usuarios puede resultar aburrido. Podremos elegir entre Soleil en sus dos formas y los protagonistas de 'Harvest Moon: Light of Hope Special Edition'. Todos desbloqueados desde el inicio de la historia.

También iremos consiguiendo una serie de ayudas para gastar en distintos niveles que harán que nada se nos resista, como en el modo anterior, no suele ser necesario debido a la baja dificultad pero nunca está de más tener un apoyo para conseguir puntos extra en algunos niveles especiales. Eso sí, si conseguimos llenar la barra de poder para recoger los cultivos y demás con facilidad, seguramente no tendremos ningún problema con la puntuación.

Buscando su lugar

Sin duda estamos delante de un título entretenido y divertido a partes iguales, pero que quizá no ha elegido la mejor plataforma para hacer acto de presencia. Parece una aventura donde pasar horas a través de nuestro dispositivo móvil pero a la que las plataformas de sobremesa del momento le queda grande en todos los sentidos. Ofrece muchas novedades respecto a la entrega de Nintendo DS haciendo que sea fácil pasar algunas horas con él, pero se queda corto en demasiados aspectos. Para empezar la historia es inexistente, algunas imágenes estáticas, a modo de novela visual, y una pequeña introducción se queda corto para esta entrega.

Los gráficos no son los mejores, pero sí divertidos y hacen recordar escenarios pasados. Es precioso ver como el mapa se desbloquea a nuestro paso y la jungla deja ver el aspecto real de la isla. Pero no hay emoción ni una historia que te atrape o que por lo menos te incite a seguir jugando. Es un título que podría haberse lucido mejor en otro lugar o al menos con un modo historia, no solo con unas melodías tan frenéticas como repetitivas y un movimiento continuo por parte del protagonista agrupando objetos en tiempo récord. No deja de ser un juego entretenido, pero 'Harvest Moon: Mad Dash' aún tiene mucho que mejorar tanto como una entrega de la saga más famosa de granja como juego de rompecabezas, por su escasa dificultad.