El 1 de Diciembre 2015 | 12:04
La burbuja del género musical explotó hace algunos años, sometida a un flujo de lanzamientos insostenible cuyo ritmo era más endiablado que el del nivel Experto de dichos títulos. Entregas numeradas, spin-off dedicados en exclusiva a Metallica, Aerosmith, Green Day, The Beatles... y a esto había que sumar el hecho de que cada una de ellas tenía su buena cantidad de contenidos descargables, lo que convertía en casi una odisea el saber por dónde empezar y continuar. Y en esto hay que nombrar a las dos franquicias responsables tanto del alzamiento como del hundimiento, 'Guitar Hero' y 'Rock Band', repartiéndose culpas y méritos prácticamente al 50%.
Y pasado todo este tiempo, ambas vuelven a intentarlo, seguramente empujadas por el feedback de los jugadores, ya que muchos echábamos de menos este género, pero también por sus propias razones: Activision, en busca de una franquicia más -y son unas cuantas- que le suponga una buena fuente de ingresos, y Harmonix, porque simple y llanamente, es lo que mejor saben hacer. Afortunadamente, esta vez las dos ofrecen dos modelos radicalmente diferentes basados en ideas distintas: 'Guitar Hero Live', el juego que nos ocupa, pensando en revolucionar todo lo conocido, y 'Rock Band 4' más orientado hacia el continuismo, y dicho sea de paso, manteniendo la fe en que lo único que echan de menos los jugadores sea un nuevo título musical, y no un nuevo modelo.
¿Cuál es la propuesta de Activision y Freestyle Games? Como decía antes, una completamente nueva, ante la que hay que resetear la imagen que tenemos del género en todos sus aspectos: cómo jugar, su contenido... Todo adaptado a los tiempos que corren, para bien, y por desgracia, también para mal.
Una nueva manera de tocar
Mi mayor duda respecto a este nuevo 'Guitar Hero Live' era la nueva guitarra. El cambio de los cinco botones de colores por dos hileras de tres no era algo que me despertara la más mínima sospecha, pero sí el evidente hecho de que, como confirmaron en Freestyle Games poco antes de su lanzamiento, solo sería necesario utilizar tres dedos para manejarla. Ahí lo primero que pensé es que la experiencia sería menos desafiante y por consiguiente, menos divertida, pero una vez probado el nivel normal de dificultad y cogido el tranquillo, pasé a Avanzado y por fortuna comprobé lo equivocado que estaba. La nueva guitarra es más divertida que la antigua, y en cuanto al reto, también la supera, ya que las combinaciones son mayores.
Quienes jugáramos ciertas horas a la anterior vertiente de 'Guitar Hero' no empezaremos exáctamente de cero, ya que la soltura en los dedos, aunque parezca mentira, no se ha quedado atrás. Lo que sí nos va a sorprender es lo que vamos a ver en pantalla, que al comienzo nos va a parecer muy sencillo, pero que a medida que nos atrevamos a subir niveles de dificultad también nos va a poner en más de un aprieto. Más de una vez me ha pasado que, una vez perdido en las notas mostradas en pantalla, he sido totalmente incapaz de recuperar el ritmo de la canción, porque simplemente, aún no he memorizado la guitarra. Es sencillo tocar dos o tres notas del mismo color, pero cuando tienes que combinar blancas y negras al mismo tiempo... ese es el verdadero momento de pasarlas canutas.
La apuesta por el realismo es clara, por la manera de tocar más cercana a los acordes reales, y por las imágenes que contextualizan cada tema. Los monigotes caricaturizados han dado paso a actuaciones representadas con actores reales que han supuesto un despligue de medios espectacular por parte de Activision, pero ya sabemos que esto nunca ha sido problema para la editora californiana... El caso es que lo mismo nos emplaza a una pequeña sala de conciertos que a un amplio escenario al aire libre con miles de espectadores, y donde tanto los de las primeras filas como nuestros compañeros de grupo reaccionarán a nuestra actuación. La elección de actores y contextos está bien seleccionada en relación al género musical que interpretemos, y algunos gestos son graciosos, pero realmente, cuando estás intentando tocar lo mejor que sabes, a lo último a lo que prestas atención es al careto que te está poniendo el batería por tu pobre actuación. El esfuerzo por aumentar la sensación de inmersión está ahí, y hay que agradecerlo, pero no deja de ser algo desaprovechado y no por culpa del juego en sí, sino porque realmente no es decisivo a la hora de jugar. No obstante, si lo estamos haciendo bien, el público terminará coreando los estribillos, lo que sí puede conseguir transmitir esa sensación de estar de verdad en un concierto.
Un tracklist inabarcable... si estamos online
El tradicional modo Historia -si se puede llamar así- en el que simplemente íbamos tocando canciones y superándolas hasta desbloquear las siguientes se ha sustituido aquí por dos festivales temáticos. En cada uno de ellos hay 5 o 6 actuaciones de cada uno de los grupos de actores que se adaptan perfectamente a cada estilo musical. Ejemplo: un grupo de cuatro chicas interpretan a Avril Lavigne, unos heavies a Bring Me The Horizon o en un pequeño club daremos un pequeño concierto secreto para tocar "R U Mine?" de Arctic Monkeys... Así hasta un total de 40 canciones que forman un tracklist en disco para todos los gustos, y por consiguiente, escaso. Porque si -como es mi caso- le quito los temas de Katy Perry, Rihanna, Imagine Dragons o Skrillex, por ejemplo, el repertorio ya es bastante más corto de lo que era al inicio. Es imprescindible estar conectado a Internet para disfrutar de todo lo que ofrece 'Guitar Hero Live'.
Guitar Hero TV es el grueso de 'Guitar Hero Live', y supone el mayor cambio en su modelo de negocio. Como bien dice su nombre, se trata de un canal de televisión en el que permanentemente se emitirán las canciones -ahora mismo, casi 200- que se vayan sumando al repertorio según horarios, es decir: a las 11:00 de la mañana podemos encontrarnos temas indie como "All The Rage Back Home" de Interpol, a las 12:00 los grandes clásicos como Joe Satriani, a la 13:00 el metal de los 90 con Korn o System of a Down... Todos ellos adornados con su videclip oficial, algo que le da un carisma netamente superior al visto en el modo campaña de 'GHL'.
Cada uno de esos temas se presenta de manera competitiva, como si de un shooter se tratara a la hora de pasar de un mapa a otro, y esto nos lleva a un modo que pica lo suficiente para tenernos durante mucho tiempo pegados a la guitarra y superando no solo nuestras propias marcas, sino a nuestros rivales. El subir de nivel y prestigio e ir consiguiendo desbloqueables -exceptuando nuevos Hero Power, meramente ornamentales- también son buenos alicientes incluso cuando la canción a la que nos enfrentamos no sea muy de nuestro gusto.
La pregunta que todo el mundo se hace es si es posible tocar la canción que se quiera del tracklist de Guitar Hero TV cuando se quiera. La respuesta es sí, pero... hay un pero, valga la redundancia. Es posible hacerlo a cambio de fichas, que hacen las veces de salvoconducto para poder interpretar nuestros temas favoritos del enorme catálogo de GHTV. Estas no son especialmente complicadas de conseguir, porque su precio a cambio de la moneda del juego no es excesivamente alto, pero aquí entra en juego el punto negro de este modo y son, cómo no, los últimamente omnipresentes micropagos. Este es el nuevo modelo de negocio que propone Activision, que a largo plazo veremos si funciona, pero tiene sus puntos positivos y otros no tanto. Por un lado, tenemos un tracklist bestial con visos de aumentarse a lo largo de los próximos años, pero por otro, heredamos lo peor del mercado free 2 play móvil, con limitaciones a la hora de acceder a todo el contenido del juego.
¿Es la vuelta que el género necesitaba?
Hay algo que es totalmente irrefutable: 'Guitar Hero Live' es tan divertido o más como antes, y la nueva guitarra es fantástica. Las sensaciones son más realistas y no por las imágenes de fondo con actores reales, sino por la propia nueva mecánica de juego, y eso es muy de agradecer porque tal vez una vuelta a lo mismo de antes no habría sido lo más gratificante del mundo. Sin embargo, el contenido incluido en el disco es muy escaso, con un catálogo de canciones corto y de calidad ciertamente discutible, y que el grueso del juego se encuentre exclusivamente online es un arma de doble filo. Tenemos -y tendremos- muchísimas canciones en Guitar Hero TV, y el esquema de fichas permite jugarlo con limitaciones pero sin desembolsar un céntimo, aunque con limitaciones. La pregunta es... ¿en qué quedará esto el día en que cierren los servidores? GHTV no durará siempre, así que es la gran interrogante: cuándo tomará Activision la decisión, y cuál será la alternativa, si es que da alguna.
Lo mejor:
- La nueva guitarra: más divertida y desafiante. - Sumando ambos modos, un catálogo de canciones tremendo, para todos los gustos, y disfrutable sin pagar absolutamente nada. - Disfrutar de los videclips oficiales en Guitar Hero TV. - El espíritu competitivo de GHTV.
Lo peor:
- La ambientación con actores y escenarios reales queda en segundo plano, no tiene la importancia pretendida. - La presencia de micropagos en Guitar Hero TV queda fea, fuera de lugar. - Sin conexión a Internet... ¿qué nos queda? Poca cosa. - Temas de Rihanna, Katy Perry... sin carácer rockero.