Dos ingenieros de mantenimiento se encuentran realizando unas reparaciones en la superficie de Marte con una peligrosa tormenta pisándoles los pies. Ellos son Jack Leary y Jessica Appleton, dos empleados de la corporación Terra que han pasado mucho tiempo juntos en la soledad del planeta rojo. Con este dúo protagonista presenta el estudio Fallen Leaf (en colaboración con Black Drakkar Games y la distribuidora Dear Villagers) su potente 'Fort Solis', un primer trabajo con el que vienen pisando muy fuerte.
Algo está pasando en la oscuridad
En los primeros minutos del juego nuestros protagonistas reciben una alarma activada manualmente que informa de algún tipo de problema en un complejo cercano llamada Fort Solis, un lugar donde se llevan a cabo labores de minería e investigación con el objetivo de hacer Marte un planeta habitable para así darles un nuevo hogar a los habitantes de la Tierra.
Jack decide acudir a la llamada de emergencia esperando encontrar respuestas, pero al llegar a Fort Solis se encuentra con todas las instalaciones del complejo cerradas a cal y canto. Aquí comienza una aventura narrativa con momentos muy oscuros y sorpresas no muy agradables para nuestros personajes.
Es importante aclarar desde el principio que no estamos ante un juego de acción en absoluto. 'Fort Solis' nos propone una aventura de exploración calmada con una narrativa que se va destapando mediante la recolección de archivos de texto, voz y vídeo repartidos por el complejo fantasma que nuestro protagonista investiga. Lo que nos mantiene pegados a la silla en sus 4 horas de duración aproximada es la fantástica actuación de todos y cada uno de los personajes que aparecen en el juego. Los tres que más destacan son los que están interpretados por Roger Clark, Julia Brown y Troy Baker, quienes hacen un trabajo sobresaliente para que nos metamos del todo en la historia.
Por momentos es imposible no recordar juegos como 'Firewatch' por el aura siniestra que acompaña cada paso que damos y por la relación que hay entre Jessica y Jack, quienes no dejan de recordar los buenos momentos que han pasado juntos y quienes se preocupan constantemente el uno por el otro.
Para que un juego narrativo nos enganche no suele ser necesario que los gráficos acompañen, pero el trabajo visual que se ha realizado en 'Fort Solis' suma varios enteros al conjunto del juego. El estudio ha querido usar la potencia bruta que ofrece Unreal Engine 5.2 para con un equipo pequeño ofrecer un juego que luce muy AAA en dirección artística, en músculo técnico y en animación.
Personalmente hay un detalle muy específico que valoro en juegos con este ritmo y de corte narrativo, y es que la interacción con el entorno y los objetos que manipulamos sea realista en animaciones. Esto en 'Fort Solis' está más que dominado, Jack pulsa cada botón, tira de cada palanca y manipula cada objeto de forma realista gracias a unas animaciones pulidas al máximo. Esto, junto al portento visual que ofrece el juego gracias a una fantástica iluminación, animaciones faciales de nivel y un gran diseño de escenarios, hace que 'Fort Solis' se nos quede en la retina durante mucho tiempo.
Algo menos sorprende 'Fort Solis' cuando se trata de interactuar con él. Podemos movernos libremente por los escenarios y recopilar información de la estación, pero no haremos mucho más que recoger objetos, revisar ordenadores y superar algunos minijuegos simplones y escenas QTE poco atractivas. No es algo que suela importar demasiado en experiencias centradas en la historia si la misma carga con todo el peso del juego, pero quizás ese no sea tampoco el caso aquí.
En apenas cuatro horas se desarrollan todos los acontecimientos de 'Fort Solis' y lo que propone es tan goloso que es fácil quedarse con ganas de más cuando aparecen los créditos. Nos habría gustado poder profundizar más en los personajes que trabajaban en Fort Solis, en los misterios de su investigación y en la relación entre Jack y Jessica. A pesar de esto, el juego no hace en absoluto un mal trabajo a la hora de contarnos, mediante los registros que hay repartidos por la estación, que es lo que les ha pasado a estos exploradores espaciales y cómo se construye el pequeño mundo del juego.
Fallen Leaf Studio puede sacar pecho y respirar con alivio después de firmar un proyecto que va directo y al pie. Visualmente espectacular, una historia tensa y atrapante, unas actuaciones de película y, en general, un primer trabajo que no roza la perfección, pero que se coloca como uno de los grandes recomendados del año por nuestra parte. No está claro si nos acordaremos de 'Fort Solis' en unos meses, pero sí se puede afirmar que se disfruta cada hora que se pasa en su oscura estación marciana.