No me sé negar a una partida de Risk. Unas cervezas con amigos en torno a una mesa capitaneada por el juego de mesa es plan estrella para cualquier tarde de sábado. Las miradas de tensión al tirar los dados, y las alianzas tácitas y públicas, son todo ello ingredientes que encuentran su réplica en la saga Empires dentro de 'Dynasty Warriors'. Con 'Dynasty Warriors 8 Empires' se añade un capítulo más dentro de la octava entrega de 'Dynasty Warriors'.
'Dynasty Warriors 8 Empires', como el resto de entregas de Empires, lo que trata es de añadir un componente de gestión político-militar a la fórmula jugable de 'Warriors'. De tal forma que nos metemos en el pellejo de un guerrero destacado, en esta ocasión elegiremos entre más de ochenta personajes, y debemos ir forjando alianzas a la vez que planeamos estrategias políticas y militares para lograr la conquista.
Un nuevo Empires
Lo que nos vamos a encontrar en esta nueva entrega de 'Empires' es un refinamiento de juegos anteriores. Por lo que si ya conocéis esta franquicia dentro de las producciones de Omega Force os podéis hacer una idea aproximada de a dónde nos dirigimos. Sin embargo, y partiendo de que es un punto de encuentro continuista, también hablamos de un refinamiento. El modo Imperio sigue siendo el que articula toda la experiencia, y también el componente multijugador en línea y local, sin embargo, para este juego ha habido un avance profundo dentro del editor.
Con el editor podemos generar nuestro propio oficial, de tal manera que el número de personajes a elegir se dispara hasta el infinito. Elegimos desde su aspecto físico, hasta el blasón que lucirá, el caballo de montura y todo lo relacionado con atributos y afinidades. Un incremento de opciones respecto a lo que ya conocíamos. Además de personajes y monturas, también podemos editar escenarios, configurar la organización política de base para los reinos y crear así nuevos entornos políticos para generar campañas completamente nuevas para conquistar el Imperio. Todo esto se puede compartir en línea, de tal forma que podemos subir nuestros mapas políticos de los reinos editados y descargar los que ya han creado otros jugadores. De esta manera, con un editor para generar contenido de base, Empires se convierte en una experiencia de longevidad abrumadora.
¿Cómo se juega 'Dynasty Warriors 8 Empires'?
Es casi soez hablar de todas la posibilidades para crear contenido sin explicar cómo se juega a 'Dynasty Warriors 8 Empires'. De partida, la mecánica puede parecer sencilla, pero las capas de profundidad son muy importantes. Empires es un juego de menús, de tutoriales y de experimentos. Una vez tenemos a nuestro oficial, con las habilidades para el combate que hayamos escogido, es el turno de establecer alianzas y conquistar territorios. En este punto, como en Empires anteriores, podemos avanzar como mercenarios o anexionarnos a algún reino. Por el camino vamos forjando compañeros fieles, y se abre la vía del guerrero honrado al servicio de su señor, o el atractivo camino del rebelde, que una vez hizo los suficientes aliados se vuelca contra su reino para apoderarse de sus territorios. En mi última partida a Empires, la que hice para este análisis, me anexioné rápidamente a un reino situado de manera estratégica en una punta del mapa, una vez avancé con mi señor Gongsun Zan y juntos conquistamos prácticamente la mitad de territorios, busqué un grupo nutrido de aliados y me revelé para tratar de hacerle desaparecer del mapa. Mi intentona, sobre el papel perfecta, fue un terrible fracaso. Las tropas de Gongsun Zan pasaron sobre nosotros como si fuesen ellos una manada de lobos y nosotros un grupillo de gatos sin destetar. Mis alianzas políticas, evidentemente insuficientes, no supieron dar soporte a mi intentona de golpe de estado.
Las tres patas de 'Dynasty Warriors 8 Empires'
Empires se divide en tres mecánicas muy bien diferenciadas. En el terreno de batalla es un 'Dynasty Warriors', tenemos que luchar contra hordas formadas por cientos de soldados a base de combos sencillos, ataques musou, y unas habilidades de soporte llamadas "estratagemas". Lo que tenemos, por tanto, es un hack'n'slash masivo de corte japonés, de controles muy sencillos y directos. O dicho en otras palabras, tenemos un 'Dynasty Warriors 8'. En este sentido sigue cayendo en los mismos errores y virtudes que el resto de juegos de la saga. El sistema de combos es simple y repetitivo; y los enemigos son completa y absolutamente clónicos.
El segundo gran núcleo jugable es la gestión de personaje. El éxito de las batallas, además de todos los elementos estratégicos, está íntimamente relacionado a las capacidades de nuestro oficial. Mantener un buen nivel, un armamento eficaz y equipar objetos es clave. Además disponemos de opciones de entrenamiento y una academia para mejorar nuestro tono físico y aprender nuevas estratagemas. En este sentido, aunque con matices, también es muy reconocible respecto a las otras sagas dentro de 'Dynasty Warriors'.
El tercer ancla, que para mi es el punto protagonista y atractivo principal de 'Dynasty Warriors 8 Empires' es justamente la gestión política. Por medio de menús, entre las batallas tenemos un número muy amplio de opciones a realizar. Desde construir edificaciones en nuestros territorios para incrementar recursos, hasta encuentros políticos con otros dirigentes para tratar de forjar alianzas. Este es el núcleo real del juego. El componente estratégico que os comenzaba diciendo que recuerda ineludiblemente a las partidas de Risk. Todo esto funciona por medio de menús con una serie de opciones muy amplias, y algunas de ellas también muy complejas. Llegar a conocer bien 'Dynasty Warriors 8 Empires' es una tarea titánica, ya que las posibilidades que ofrece esta octava entrega son muy amplias. Nuestro personaje, parte de mercenario, puede subir de rango a través de ocho categorías diferentes. A cada rango superior se le confiere una capacidad de responsabilidad cada vez mayor, con lo que el abanico de posibilidades cada vez es más extenso. Además, y en la ecuación entra otra variable, cada acción que llevemos a cabo nos consumirá un mes, y cada mes podríamos tratarlo como un turno.
El perfeccionamiento de una fórmula, y la crítica en lo visual
'Dynasty Warriors 8 Empires' es un perfeccionamiento de una fórmula, pero una fórmula tan longeva que viene acumulando todo lo que teníamos anteriormente y añadiendo elementos. Esto da en conclusión dos elementos que pueden parecer contrapuestos. Por un lado, la sensación de déjà vu respecto a entregas anteriores es evidente, a simple vista puede parecer que no hay apenas cambios y sobre el terreno de batalla en las partes de acción también está radicalmente anclado en las mecánicas de 'Dynasty Warriors 8'. Por otro lado, justo por llevar a cabo este proceso acumulativo, estamos ante un título de posibilidades y contenido casi infinito.
El punto de crítica clásico dentro de los 'Warriors' en esta ocasión no lo podemos dejar de lado: el apartado gráfico. Hemos jugado a la versión de nueva generación (Xbox One) y evidentemente es palpable que estamos ante un juego que a nivel técnico ancla su base en PlayStation 3 y Xbox 360. Aún más, ya en los anteriores sistemas estamos un juego a nivel técnico de perfil medio. Hay una cantidad ingente de personajes en pantalla, que es el manido argumento para justificar lo simple del aspecto estético dentro de la franquicia, pero también hay que decir que sus animaciones son muy estáticas. Lo que sí ha visto una evolución en este caso son los escenarios: entornos más variados, y un diseño más rico y complejo.
La conquista
A modo de conclusión, es evidente que estamos ante la base de 'Dynasty Warriors 8' por lo que sus ejes principales ya los conocemos. Igualmente, es evidente que estamos ante una propuesta continuista respecto a 'Empires' anteriores. Pero es igual de evidente que nos hallamos ante un juego muy completo, que gracias a la cantidad de opciones, multijugador y al editor, tiene una vida casi infinita. Dentro de los 'Warriors' la propuesta Empires es la más compleja con amplia diferencia, pero seguramente también la más apasionante. 'Dynasty Warriors' ha sabido crear y alimentar un género durante años, que lanzamientos como 'Dynasty Warriors 8 Empires' son muestra de que está muy vivo.