Durante las primeras horas de la tarde del pasado martes se filtró la existencia de una expansión para 'Driveclub' con las motos como protagonistas, de nombre 'Driveclub Bikes'. Tras el accidentado lanzamiento del juego de Evolution Studios han ido llegando contenidos frecuentemente en forma de nuevos coches, circuitos, pruebas, etc... pero realmente, los previstos al mismo tiempo que el anuncio de su pase de temporada. Lamentablemente, los problemas del inicio de 'Driveclub' costaron sus empleos a varios miembros del estudio británico, con lo que era fácil olvidarse de que fuera a llegar algún añadido más.
Y mucho menos en forma de motos, claro. 'Driveclub' logró un equilibrio casi perfecto entre arcade y simulación, convirtiéndolo en el juego de velocidad más divertido de PlayStation 4, ayudado además por el carácter inmediato de la gran mayoría de sus pruebas. ¿Por qué no adaptar la misma fórmula a las motos? Hay un vacío importante en la velocidad sobre dos ruedas, con pocos juegos e incapaces de satisfacer a sus grandes aficionados, y desde aquel gran 'Tourist Trophy' en PlayStation 2, seguramente no hayamos visto ninguno medianamente convincente. ¿Es 'Driveclub Bikes' ese juego? Aún no, pero no vamos a encontrar nada mejor en el subgénero.
'Driveclub Bikes' llega con un esquema similar al de 'Driveclub', con 43 pruebas repartidas entre pruebas de velocidad, contrarreloj y de habilidad. Una de las mayores críticas que sufrió el original fue la cantidad de contenido con la que llegó de serie, sobre todo en forma de retos para un solo jugador, cuestión que aquí no deja lugar a dudas. El modelo con el que sale de lanzamiento convierte a 'Driveclub Bikes' en una expansión con una relación calidad-precio-contenido realmente buena. Y claro, no solo son las pruebas, y es que ya sabemos que no es suficiente con ganar, sino que están los clásicos desafíos secundarios y los retos dinámicos en carrera, a lo que hay que sumar los eventos aleatorios, online, etc... En definitiva, tenemos motos para muchas horas por delante, pero claro... ¿es divertido?
¡No, divertidísimo! Si la vertiente de coches presumía de equilibrio entre arcade y simulación, como dije antes, la fórmula en 'DB' tiende más hacia el primero, convirtiendo las carreras en una de las experiencias más frenéticas que se pueden vivir hoy día en una PlayStation 4. Sumado a esto, una sensación de velocidad tremenda, lo que hace que una vez al manillar, el mayor desafío esté en tener los suficientes reflejos como para no comerse una curva lo suficientemente cerrada como para que no baste con frenar a última hora. La conducción es senclla y no es complicado acostumbrarse a esta nueva manera de conducir en 'Driveclub', ya que una vez más la curva de aprendizaje está muy bien diseñada.
Como es habitual, las primeras pruebas serán un paseo, con unas motos de manejo sencillo, no demasiada velocidad, y una IA que salvo rara ocasión, no hace grandes alardes. Pasadas las primeras 10, aproximadamente, la cosa va a cambiar radicalmente con motos mucho más potentes y más que nada, una IA endiablada que esta vez sí, es capaz de auténticas virguerías. A partir de este momento es cuando se suda de verdad para lograr el éxito absoluto en cada prueba, porque a todo lo anterior, vamos a sumar un diseño de circuitos más enrevesado aún, y dicho sea de paso, el grueso de 'Driveclub Bikes y su mayor reto.
Ningún juego de motos ha conseguido en años conseguir transmitir las sensaciones que transmite 'Driveclub Bikes', y es que al alcanzar velocidades de 250 km/h o superiores, parece que va a faltar poco para comenzar a despegar las ruedas del suelo, y es un espectáculo muchas veces absurdo. El apartado visual que ya vimos en el juego original es un plus, y ya sabemos hasta qué punto, porque si en condiciones normales todo se ve de lujo, cuando entran en juego condiciones climáticas adversas, escenarios nocturnos, los rayos del sol pasando a través de las ramas de los árboles, etc... el mayor reto será no quedarse alucinado y terminar en un choque con el propio escenario.
Evolution Studios no son nuevos en esto de las motos -ya las incluyeron en 'Motorstorm'-, pero nadie esperaba que terminaran llegando a un videojuego cuyo mejor momento parecía haber pasado ya. Su llegada no solo llega para cubrir un hueco en el mercado, sino también para que mucha gente vuelva a instalar 'Driveclub' en su disco duro y continúe aportando al juego, porque al fin y al cabo, es la comunidad quien más ha hecho por él.
Volviendo a la vertiente de las motos, se trata de una expansión casi, casi ejemplar en cuanto al precio al que llega, a su contenido y a la diversión que ofrece, que para los amantes de la conducción en general será mucha. Sin embargo, lo más seguro es que los que esperan un simulador se queden decepcionados, pero deberían hacerse a la idea de que tal vez no lo vean en mucho tiempo. El género de la conducción no pasa por su mejor momento en cuanto a ventas, y bastante suerte es ver títulos de coches que no se llamen 'Gran Turismo' o 'Forza', con lo que pedir uno similar de motos se me antoja una utopía.