Análisis de 'The Sexy Brutale' para Nintendo Switch; el puzle como hilo narrativo

Meses antes del lanzamiento de 'Rime' el equipo de Tequila Works pasaba por una crisis de credibilidad. Salían a la luz en foros como NeoGaf supuestos detalles sobre mentiras y engaños por parte del estudio madrileño. Acusaciones que los tachaban de "vendehumos", afirmando que el juego nunca fue una realidad, que lo poco mostrado era únicamente una herramienta para seguir consiguiendo fondos de Sony, quienes fueron compañeros de viaje hasta que el estudio se desvinculó de los padres de PlayStation para desencadenar todo un barullo de suspicacias en las redes. Tras ese episodio llegó la calma, 'Rime' se mostró funcionando en material exclusivo de IGN y con los ánimos reposados llegaba una sorpresa: Tequila Works se aliaba con un estudio nuevo, desconocido, debutante en el desarrollo independiente (aunque experimentados tras haber trabajado en EA y la fallecida Lionhead); se aliaba con Cavalier Studios. El retoño de aquel enlace respondía al atractivo nombre de 'The Sexy Brutale'.

Una colaboración diferente

El discurso de presentación de esta nuevas licencia sigue sin hacerle mucha justicia a día de hoy: "Asistimos a una fiesta de máscaras en una opulenta mansión donde los invitados están siendo asesinados a manos del servicio. Nuestra labor es evitar estos asesinatos." Así es, esa es la premisa inicial de 'The Sexy Brutale', así empieza la odisea de Lafcadio, un nuevo personaje mudo y aparentemente amnésico que deberá resolver una serie de asesinatos brutales mientras manipula el tiempo para revivir 12 horas de horrores una y otra vez.

Sobre esos cimientos narrativos se asienta uno de los juegos de puzles del año. Un título al que la definición de "juego de puzles" se le queda corta por momentos. Gracias a la mecánica de retroceder una y otra vez el tiempo podemos asistir a lo que ocurre en cada habitación de la mansión que sirve como único escenario de esta aventura. A media que salvamos a los invitados y abrimos nuevas localizaciones no solo desentrañamos las historias de cada uno de los asesinados, si no también las de la propia mansión y la de Boone, si excéntrico y multimillonario dueño.

Casi tan importante (cuando no más) que cada personajes es la historia de cada sala, pues esas historias se vinculan directamente con las de todos los personajes de este cuento y todas han sido moldeadas gracias a la personalidad de cada uno de los enmascarados. La amistad de los personajes principales con el dueño de la mansión es el hilo conductor que los relaciona, haciendo de este modo que descubramos tramas de relaciones íntimas, celos y soberbia. Incluso descubrimos como cada sala de la mansión es estéticamente muy distinta, teniendo todas una personalidad única que ayuda a que no nos perdamos por su intrincada arquitectura. De alguna forma es el reflejo de la mente de su dueño, pero hablar más de eso es casi spoiler. La narrativa del juego es tan brillante como el diseño de los propios niveles, ambas facetas del juego se nos presentan como páginas arrancadas de un libro que deberemos recomponer, reiniciando el día con cada descubrimiento, usando los poderes que nos otorgan las máscaras de cada personaje rescartado para recabar información, ejecutando acciones de forma ordenada y ágil antes de que el tiempo se nos eche encima y el reloj se sobre una nueva víctima.

Todos los detalles sobre la jugabilidad y las bases del juego podéis encontrarlos en nuestro análisis sobre la versión de Xbox One firmado por Raúl Manero. Pero al margen de todo eso me gustaría destacar el trabajo de guión que hay tras este título, con detalles que no se suelen tratar en los análisis por bordear el campo del destripe (tranquilos, no será tal).

Más allá del rompecabezas

Cuando encajamos todas las piezas se descubre una historia realmente cruda y adulta. Tras una fachada visual colorida, y una primera impresión deslumbrante, se esconde un buen trabajo de escritura que nos deja con una de las mejores historias del año; aunque bien es cierto que esto se debe más al cómo está contada que a la historia en global, lo cual tampoco quita mérito alguno a los guionistas. Se agradecería, eso sí, un poco más de misterio, pues al final todos los misterios del juego se revelan de forma bastante explícita y no dan lugar a la especulación, aunque en las fases finales del juego podría vislumbrarse esa posibilidad.

Por tanto, 'The Sexy Brutale' no es solo un juego recomendable por ofrecer un tipo de juego de puzles muy distinto a lo que estamos acostumbrados, por fusionar un par de géneros y hacer que las líneas que las separan sean casi intangibles, es un juego recomendable porque ejecuta con maestría cada concepto que pone sobre la mesa. Lo mecánico, lo narrativo, lo artístico y lo musical son elementos que funcionan como un conjunto de engranajes debidamente engrasados.

Cabe reseñar que la duración del juego es moderada. Pues en 5-6 hora se puede resolver todo con facilidad y con un poco más podemos conseguir todos los coleccionables que hay a lo largo y ancho de la mansión. Además una vez conocemos la solución a todos los puzles del juego y hemos obtenido los coleccionables no hay razón parea volver a darle una segunda vuelta más que recordar un juego maravilloso meses después. Esto es algo a tener en cuenta, pues según cómo lo veáis puede resultar escaso o justo el juego que estabais buscando.

Lanzamiento en Switch

Respecto a la versión de Nintendo Switch, que es la aquí discutida, no es ni mucho menos la mejor. Hay una sensación de falta de optimización desde el primer minuto hasta el último. El caminar de nuestro protagonista no es todo lo fluido que debería para que ni debamos poner atención en dicha animación. Los tiempos de carga son numerosos y van desde los 1-2 segundos hasta los 10 largos en según qué zonas. La calidad general de los extraordinariamente bellos escenarios de la mansión está un poco por debajo en cuestiones de nitidez que las versiones de consolas y ordenadores.

Además por la jugabilidad del título se echa en falta la posibilidad de usar la pantalla táctil. La calidad ni mejora ni empeora notablemente al pasar de portátil a sobremesa. Dicho lo cual, es juego no es ni mucho menos injugable, se disfruta a la perfección y el único motivo para no comprarlo en Nintendo Switch es tener en casa alguna de las otras plataformas en las que ha sido lanzado. Si Switch es tu única si, si gustas de coleccionar títulos independientes en la de Nintendo o si la portabilidad te da la vida, no hay excusa, el juego merece los 19,99 € que cuesta, pues sus problemas técnicos no lo lastran por ser un título eminentemente pausado que no requiere de una alta tasa de fotogramas por segundo para ser disfrutado.

Conclusiones

Los profesionales de Cavalier y Tequila demuestran un grado de compenetración y un saber hacer soberbio en esta obra a medio camino entre la aventura gráfica y el rompecabezas, dando un giro de tuerca a ambos géneros sin apenas despeinarse. De este modo se convierte 'The Sexy Brutale' en uno de los juegos más interesantes del año y ahora está en todas las plataformas principales, de modo que no hay muchas excusas para perdérselo a poco que os interesen las propuestas diferentes.

Es de especial mención que una nueva licencia haya conseguido destacar en un género que es capaz de lo peor y lo mejor al mismo tiempo. Cada semana tenemos un par de rompecabezas nuevos con cero personalidad, juegos en los que movemos figuras geométricas de colores planos por escenarios con poca creatividad artística y mecánica. Al mismo tiempo en los últimos años hemos tenido obras maestras del género como 'The Witness', 'Fez' o 'Stephen's Sausage Roll'. La idea de basarse en la resolución de problemas desde un prisma más narrativo que matemático es la guinda del delicioso pastel que es 'The Sexy Brutale'.