El 24 de Septiembre 2019 | 19:00
Nintendo ha vuelto a demostrar por qué hacer las cosas bien siempre sale más rentable que hacerlas rápido y sacarlas mal. 'The Legend of Zelda: Link's Awakening' es un claro ejemplo de cómo hay que hacer los remakes, de cómo se contenta a los fans (tanto nuevos como antiguos) y de cómo se hace un juego que, 26 años después, sigue teniendo una jugabilidad que no hay que tocar en absoluto para que sea divertido, original y brillante.
Prácticamente ya hemos analizado lo que viene a ser el "último" juego de 'Zelda' con esas líneas. Gráficamente es original e impresionante, su sistema de juego no envejece y las novedades que trae (que en su mayoría son detalles) no hacen más que aportar a algo que, de por sí, era bastante bueno.
Por todo ello, y aunque soy bastante reacio a darle sobresalientes a los remakes, he acabado cediendo ante el buen hacer de este 'Link's Awakening' que me ha vuelto a sorprender una vez más. Ahora, en Nintendo Switch.
Una jugabilidad que no pasa de moda
Si hay algo que asombra de este remake es que la jugabilidad apenas se ha tocado. Nos encontramos ante un juego que, aunque gráficamente es radicalmente distinto al original, no ha cambiado ninguna de las bases con las que manejamos al personaje.
Sí, tenemos un movimiento más libre y más botones que nos permiten acceder a los objetos y las habilidades de una forma más rápida e intuitiva. Pero más allá de eso, todo se mantiene igual.
Link usará su espada como principal arma y su escudo como su principal defensa. Su forma de atacar, su velocidad, sus movimientos, sus habilidades, las debilidades de los enemigos... todo se ha mantenido intacto aún 26 años tras el lanzamiento, en Game Boy, del primer juego.
No todos los juegos pueden decir esto, y mucho menos los que tiene acción en tiempo real, como viene a ser este. Normalmente acaban pasándole factura los años y las novedades que se van incorporando a otras entregas o juegos similares. Pero en este caso, no es así.
'The Legend of Zelda: Link's Awakening' mantiene todo lo que lo hizo grande y añade solo lo que se ha ido incluyendo en entregas posteriores del mismo estilo, como los de Game Boy Advance o los de Nintendo DS y 3DS.
El resultado es que tenemos un juego que no envejece, que no se hace ni lento ni aburrido y que, tocando muy pocas cosas, es realmente un juego que puede disfrutar hoy día un viejuno (como yo) que jugó al original, o un recién iniciado en la saga sin que encuentre diferencia alguna.
Un apartado artístico brillante
Nintendo ha dejado claro que su saga del Héroe del Tiempo cambia constántemente. El estilo artístico de casi cada entrega pega un giro de 180 grados y nos plantea elementos nuevos y sorprendentes.
Y lo sigue haciendo pese a estar ante un remake de un juego que salió en 1993. La compañía ha conseguido mantener el estilo gráfico de por aquel entonces, en apenas 8 bits, y darle un toque de color, definición y detalle que lo convierte en una verdadera joya.
Sí, es cierto que, de aquí a un tiempo, los chibis se han puesto algo de moda. Hemos visto varios juegos que usan este estilo, como 'World of Final Fantasy', pero en lo físico también lo están triunfando bastante. Nintendo no innova en este sentido.
Pero lo que sí que hace Nintendo es arriesgar y darle un cambio brutal al juego con este nuevo estilo tan cartoon y colorido. Lo más gracioso e interesante de todo es que no tenemos que hacer ningún tipo de esfuerzo a la hora de identificar lo que veíamos en amarillo y verde en Game Boy y lo que vemos ahora con todo detalle en Nintendo Switch.
Los árboles son distintos... pero no lo son. Los personajes ahora tienen rasgos faciales, pero es que los identificábamos igualmente en aquel juego de 1993. ¿Cómo narices se consigue eso? ¿Como se transforma un juego tan drásticamente sin que nadie "se de cuenta" de la base de ese cambio?
Pues haciéndome estas preguntas no me queda otra que aplaudir a los que han dado con este nuevo diseño que recuerda al viejo sin lugar a dudas. Y, además, convence.
Pero si hablamos de cómo lo han bordado con los gráficos, no podemos olvidarnos de la banda sonora, otra gran maravilla.
En esta ocasión, Nintendo ha optado por usar pocos instrumentos a la hora de formar lo que viene a ser la ambientación del juego. Quizás es un intento de darle un toque más actual sin olvidar las raíces del chiptune de donde viene.
Pero, de la misma forma que con los gráficos sabíamos perfectamente qué es cada cosa y de dónde viene, en la banda sonora ocurre exactamente igual. Casi podría decir que, en mi mente de niño de 10 años, cuando jugué al título original, lo que sonaba en mi cabeza se podría parecer a lo que escuchan los niños de 10 años de hoy día.
Llamadlo imaginación, espíritu infantil o como queráis, pero así es. El chiptune que sonaba cuando jugabas al título en Game Boy está a años luz de lo que escuchamos hoy. Sin embargo, el resultado es exactamente el mismo. Las sensaciones son las mismas. Y eso es también algo de alabar.
Así pues, Nintendo nos ha dejado un remake con unos gráficos y una banda sonora que no tienen "nada que ver" con el juego original. Sin embargo no se separan para nada del espíritu que transmitían en su momento. Las sensaciones son las mismas.
Eso, queridos lectores, es un remake.
Con un poco más de contenido
Es evidente que el juego no llega "pelado y mondado". 'The Legend of Zelda: Link's Awakening' es un juego que incorpora algunos elementos nuevos más allá de lo que viene a ser el apartado artístico.
La mayoría de estos añadidos son detalles que pueden casi pasar desapercibidos. En primer lugar porque se integran muy bien en el estilo y en el juego. Y en segundo lugar porque ya nos hemos acostumbrado a tener a mano más accesos directos que los que teníamos antes.
Así, ahora contamos con muchos más botones para establecer los objetos. Algunos se asignan de forma automática a botones, como la espada, las botas o el escudo cuando antes eran elementos que había que poner en A o en B como poníamos las bombas o el arco.
El menú también se ha hecho más intuitivo que antes, de fácil acceso y con más información y el mapa ahora cuenta con una serie de marcadores para que podamos indicar a dónde tenemos que volver en un futuro. Todo un verdadero avance en este juego que se basa en ir de aquí para allí cual recadero en hora punta.
Otro de los añadidos es el creador de mazmorras. Y es que Nintendo le ha cogido el gusto a eso de invitarnos a que hagamos nuestros propios puzles y mazmorras. Ahora, no os esperéis un "Zelda Maker" a lo 'Super Mario Maker'. Es algo mucho más básico pero que puede alargar el tiempo que le echemos al juego exponencialmente.
Básicamente consiste en poner habitaciones y elementos en ellas que nos permitan hacer más retos a los jugadores. Enemigos, bosses, puertas... La verdad es que el resultado es muy resultón y apañado y nos da esperanzas de cara a un futuro juego del estilo "Maker", pero con Zelda.
Sí sé que es difícil, pero dejadme soñar un poco. Que es gratis.
Conclusiones del análisis de 'The Legend of Zelda: Link's Awakening'
Poco me queda por comentar de este magnífico juego. Nintendo ha hecho, como siempre, una tarea brillante y ha aprovechado perfectamente los recursos de su consola.
'Link's Awakening' funciona sin problemas tanto en modo sobremesa como en portátil. Sí que se nota un poco (solo un poco) en el tema resolución, pero nada que haga que se te caiga sangre por los ojos.
De hecho, por el estilo y por cómo era el juego original, personalmente disfruto mucho más de él en modo portátil. Llamadme viejuno pero es así.
Si me preguntáis sobre ralentizaciones (que he leído en algunos foros que las hay), en mi caso no he encontrado ninguna situación, por muchos elementos que haya en pantalla, que las genere. Y he jugado en el modelo antiguo de Nintendo Switch, por lo que no es cuestión de versiones.
Tampoco hay tiempos de carga excesivos. Solamente la primera carga se hace un pelín larga (10 o 15 segundos), pero dado que el mundo es contínuo y no está dividido en pequeños cachitos como el original, es comprensible.
Y la traducción es simplemente sublime. Ya os encontraréis con diálogos bastante interesantes, ya.
En definitiva, poco malo puedo decir del juego, lo cual no significa que no las tenga. Simplemente, un servidor no los ha encontrado o, simplemente, no considera que eso sea un error. Si incluso han incluído el poder robar en la tienda... y que desde entonces te llamen "Ladrón" en vez de tu nombre.
Por todo ello, si eres fan de 'Zelda', es imposible que no disfrutes con este título. Y si no lo eres es quizás el mejor juego para empezar.
Ahora mi pregunta es ¿para cuándo los 'Oracle', querida Nintendo?
Lo mejor:
- apartado artístico simplemente brillante
- aunque es un remake, suena y se juega como el original
- la jugabilidad no envejece para nada
- se disfruta igual en modo portátil y en sobremesa
Lo peor:
- quiero los 'Oracle of Ages' y 'Oracle of Seasons' también así
- y de paso 'A Link to the Past'