El 17 de Abril 2019 | 12:00
El fútbol puede llegar a ser muy complicado. Tantas reglas, impedimentos, fueras de juego, VAR y demás pueden echar a perder un poco la diversión para los que buscan algo más básico (como un servidor). Y en esos momentos, cuando solo quieres algo simple y de meter patadas, es cuando aparece este 'Super Kickers League' y te da una nueva forma de jugar al fútbol algo diferente.
Sin normas, con habilidades locas y con un estilo bastante curioso. Esa es la presentación que nos ofrecen los chicos de Xaloc Games para meternos este juego indie entre ceja y ceja y demostrarnos que jugar al fútbol puede ser de todo menos complicado.
Fútbol sin complicaciones
El planteamiento del juego no tiene mucho misterio. Como os hemos dicho, simplemente consiste en meter goles en un partido de tres contra tres. Y ya está. No hay más normas. Y sí, eso significa que podremos meterle de leches a los oponentes, barrerlos como si de 'Captain Tsubasa' se tratase o lanzarles habilidades al más puro estilo 'Inazuma Eleven'. Bueno, al más puro estilo simplificado, claro.
El único objetivo del partido es, como os podréis imaginar, marcar los goles. El que más goles tenga en su marcador al final del partido, gana. Independientemente de los jugadores que haya lesionado por el camino (en nuestra imaginación, ya que a pesar de las hostias que les metemos aquí nadie sangra).
Para hacer todo esto más ameno, el juego cuenta con un par de tipos de controles. Los de tipo defensivo y los de tipo atacante.Los primeros consisten en hacer barridas a mala leche o, directamente, meterle un placaje a lo que tengamos delante. El primero de los dos lo que hará será robar el balón y el segundo tumbará a nuestro oponente y lo dejará ko durante unos cuantos segundos. Lo que todos deseamos hacer en el campo real y nunca nos dejan, vaya.
En cuanto a los movimientos atacantes tenemos unos cuantos más. Los pases (largos y cortos), los disparos (cargados o simples) y los movimientos para driblar y esquivar que nos ayudarán a evitar los golpes enemigos.
Un poco de 'Inazuma Eleven' para aderezar
El juego con el planteamiento que os hemos comentado es entretenido. Pero no ofrece mucha variedad a la hora de elegir equipo. Los personajes son todos iguales y solo cambian de color. No hay estadísticas ni nada por el estilo.
Pero no os preocupéis, porque Xaloc Games ha pensado en esto y ha metido una característica diferenciadora a algunos de estos personajes. Se trata de los capitanes. Estos son los personajes más poderosos del juego. No porque sean particularmente bestias o rápidos, sino porque tienen habilidades a lo 'Inazuma Eleven'. Es decir, un poco locas.
Cada capitán tendrá una (y solo una) habilidad que podrá usar durante el partido, pero solo cuando se haya cargado. Esta consistirá en cosas random como, por ejemplo, lanzar meteoritos o súper velocidad. Pero esas son las que tendrán algunos de los cuatro capitanes que nos darán al principio del juego. Luego, conforme vayamos desbloqueando (al ganar partidos) podremos usar aliens, lluvias tóxicas o cosas bastante pero bastante locas.
Eso sí, no os esperéis nada espectacular ni que desequiibre el marcador. Todas las habilidades son bastante simples y pueden ayudarnos en un momento determinado, pero no es que sean el máximo exponente de la originalidad o la espectacularidad.
Pero aún así, se queda algo corto
Con todo esto, parece que el juego se plantea bastante entretenido. Y así es, pero solo al principio. Pese a todos los capitanes que tenemos para elegir y las posibilidades que nos dan, lo cierto y verdad es que no son determinantes en el modo de juego principal.
Los jugadores son realmente iguales a excepción de la habilidad del capitán de hacer sus pinitos y cosas especiales. Pero es que realmente al final pasaremos de él. Cualquier personaje puede desatar la habilidad del capitán si este está en juego, así que no hay mucha diferencia.
Así pues, el partido se limita al final a tirar a puerta hasta que a la IA le da por dejar de parar tus tiros o de mandar el balón al larguero (en serio, he llegado a hacer hasta 5 largueros seguidos). Es entretenido meter patadas y empujones, pero se hace tedioso cuando sodo se basa solo en ello.
Para aliviar un poco esta sensación, podremos desbloquear otro modo en el que solo manejaremos capitanes. El equipo de tres contará con estos tres personajes y con sus tres habilidades. Y esto le da un poco más de diversidad al juego, aunque tampoco es la panacea.
Por desgracia, pese a que el apartado gráfico también es bonito, los escenarios y las animaciones no terminan de mostrar algo fluído. Las carreras se ven raras y tampoco se diferencian los jugadores en el campo más que por sus colores. Y la música no es tampoco nada del otro mundo.
Sí, hay varios modos de juego (el normal, el de capitanes y el "retro") y muchas cosas a desbloquear (modos, logros, campañas, copas, etc), muy al estilo de 'Super Mario Kart'. Pero más que picarnos, al final lo que hace es dejarnos un poco cansados de hacer siempre lo mismo.
La gran baza del juego está en el modo multijugador, en el que podremos jugar hasta con 6 personas en un solo partido. Cada una controlando a un jugador, por supuesto. Eso sí que es una locura y es más entretenido. Pero para poder desbloquear a todos los personajes hace falta jugar solo... y mucho.
Conclusiones del análisis de 'Super Kickers League'
'Super Kickers League' es un juego entretenido, pero que se enfoca demasiado en desbloquear modos y campañas cuando debería de haber puesto mucho más énfasis en el multijugador.
Es un juego que se hace repetitivo al cabo de tres o cuatro partidos y que tiene una IA y una probabilidad bastante puñetera cuando quiere. No podemos manejar a los porteros y los escasos movimientos defensivos no ayudan a que nos entretengamos machacando al oponente.
Sin embargo, jugar con amigos lo hace más ameno y entretenido (como casi todo). Pero por desgracia, para tenerlo todo y disfrutar de todo lo que ofrece hay que echarle mucho tiempo al modo normal. Y no es precisamente lo más divertido del mundo ya que, a diferencia de un 'Mario Kart', no hay que aprenderse circuitos ni los escenarios son muy diferentes entre sí.
Lo mejor:
- no hay reglas, es simple
- hay mucho que desbloquear
Lo peor:
- repetitivo
- movimientos simples
- la IA