Análisis de 'Killing Floor 2' para Xbox One

Lo zombis, infestados y demás terroríficas criaturas siempre han estado ligadas al mundo de los videojuegos, con franquicias míticas como, por ejemplo, 'Resident Evil'. No obstante, en los últimos años han crecido muchísimo en popularidad entre los jugadores, y cada vez son más las propuestas que apuestan por este tipo de enemigo. Hoy nos toca hablar del último juego que se incorpora a la store de Xbox con este elemento como reclamo, 'Killing Floor 2', el videojuego desarrollado por Tripwire Interactive. Se trata de un título que los usuarios de PC ya llevan tiempo disfrutando, y que hace relativamente poco se estrenos en PS4, pero no ha sido hasta ahora cuando ha llegado a la consola de Microsoft, permitiendo a los usuarios de Xbox One relajarse despedazando Zeds. Si todavía no conocéis que ofrece 'Killing Floor 2', esta es una ocasión fantástica para acercaros a este popular juego.

Una base sólida que debe mejorar

'Killing Floor 2' es una propuesta sencilla y eficaz, cuyo gran déficit es la cantidad de contenido que ofrece. La premisa principal es simple, se trata de un modo horda donde se deben superar una serie de oleadas. Fácil, ¿verdad? Estas criaturas a las que nos enfrentaremos son conocidas como Zeds, y cada una cuenta con un diseño y unas habilidades distintas al resto. Por ejemplo, tenemos uno con una cuchilla en cada brazo que especialmente veloz, una pequeña y delgada que pega unos gritos capaces de destruir granadas o un imponente ser acompañado por una sierra mecánica... Existen distintos clases de personajes (médico, asalto, etcétera), cada uno de ellos con sus armas específicas, un detalle importante ya que al jugar con ellas ganaremos más experiencia que nos permitirá subir de nivel nuestro superviviente y desbloquear una serie de perks (el nivel máximo actualmente es 25). Estas habilidades nos permitirán cosas como, esprintar más tiempo, tener más vida, hacer más daño, etc.

Por lo que respecta a modos de juego no tendremos muchas alternativas. Podemos jugar online u offline, teniendo dos posibilidades, la primer jugar como supervivient en las clásicas hordas. Estas partidas pueden ser de 4, 7 o 10 oleadas, más una ronda con el jefe final, en donde solo encontramos dos criaturas, El Patriarca y el "Doctor hans Volter". El primero es un enemigo que lanza misiles, se hace invisible, utiliza una metralleta pesada y huye para recuperar vida. El segundo de ellos es un escurridizo personaje que hace uso de ataques cuerpo a cuerpo, gases venenosos y un campo de energía para protegerse en determinados momentos. En función del nivel de desafio que queramos emprender podemos escoger las siguientes dificultades: normal, difícil, suicida e infernal. La segunda modalidad, y más divertida, es un enfrentamiento entre supervivientes y Zeds, en donde iremos tomando el rol de criaturas que sigan con vida en cada ronda, lo más parecido en la actualidad a 'Left 4 Dead'. El primer equipo en acabar con todos los componentes rivales, gana.

Desafortunadamente el juego no cuenta con ningún modo de historia ni narración que profundice en los sucesos acontecidos previamente a este desastre, así como tampoco para profundizar en los distintos personajes. Eso sí, cuenta con micropagos que por un módico precio nos permiten cambiar la apariencia de personajes o armas.

A golpe de guitarra

Si nos paramos a mirar con mayor detalle que nos ofrece 'Killing Floor 2' en su apartado técnico, nos encontramos con un shooter que no destaca especialmente en lo visual, pero que, ni mucho menos es un desastre. A nivel de modelados y texturas el juego es correcto, no se puede comparar con los grandes títulos de la generación, pero ese tampoco es su objetivo. Los diseños de los enemigos, supervivientes y armas tienen identidad y están bien diferenciados entre ellos, y los efectos como pueden ser los disparos, desmembramientos de los Zeds p explosiones resultan visualmente atractivos para el jugador.

Por lo que respecta al sonido, tenemos que diferenciar dos apartados. Por un lado, tenemos todos los efectos tales como: las pisadas, los gritos de los Zeds, el ruido de las armas o incluso la figura de un narrador (que se limitará a un par de frases por partida). Dentro de ese campo podemos decir que no nos encontramos nada fuera de lo habitual. Pero eso no es todo, y es que además, mientras vamos acabando con todos estos monstruos que inundarán nuestra pantalla, lo haremos con una música cañera de fondo que nos invitará y nos amenizará nuestra ardua tarea. Además, la música también servirá para hacernos saber un poco la situación de partida que tenemos, ya que, por ejemplo, en los intervalos donde podemos ir a la tienda, ese tipo de música se tomará un pequeño respiro.

Por último nos quedaría hablar un poco sobre bugs o problemas que pueda presentar 'Killing Floor 2' a la hora de jugar, y pese a que no hay nada especialmente dramático, sí que es necesario recapitular algunos de los problemillas que os encontrareis. Hay algunos meramente anecdóticos como, por ejemplo, que se queden cuerpos o partes de cuerpos de Zeds enganchados con algún elemento del mapa, flotando... No obstante, hay otros que si pueden lastrar algo la experiencia, sin llegar a ser algo muy exagerado. Aquí nos encontramos con caídas de framerate en momentos de mucho estrés para el juego (muchos personajes en pantalla, explosiones...). No obstante, lo que puede ser más frustrante para el jugador son los excesivos tiempos de espera al buscar partida, y los problemas de servidores que pueden hacer que tengas que jugar en un server de USA o de Asia. Lo cierto es que los tiempos de espera pueden deberse a que la comunidad no sea muy grande, pero si añadimos esos errores de los servidores, todo apunta a que será un cúmulo de circunstancias. A pesar de todo, pese al correspondiente aumento de ping, no hay grandes problemas de lag, aunque estos si han estado presentes en algunas de las partidas pero aun así se dejaban jugar.

Conclusiones

Prácticamente con total seguridad, 'Killing Floor 2' no será el mejor videojuego que veas este año pero, sin duda, la gente de Tripwire Interactive ha conseguido lanzar un producto divertido, frenético y adictivo que, después de cosechar muy buena crítica en PC y PS4, llega a Xbox One con la intención de repetir ese éxito, cuanto menos social. No estamos delante de un shooter realmente complejo, sino que se trata de una propuesta sencilla y eficaz que consigue enganchar al jugador desde un primer momento, ya que a nivel de mecánicas y jugabilidad no tiene ningún aspecto realmente exigente que obligue al jugador a necesitar un proceso de aprendizaje. Simplemente deberemos equiparnos y salir a las calles a machacar Zeds.

El juego de Tripwire Interactive está enfocado a un público muy concreto, y son aquellos jugadores que buscan pegar tiros a diestro y siniestro acompañados con un grupo de amigos, y es una alternativa muy seria para todos aquellos usuarios que disfrutan del popular modo zombis de la franquicia 'Call of Duy'. Sin embargo tiene un problema bastante importante, su escasez de contenido, un hándicap que acaba haciendo que la experiencia sea monótona y repetitiva, especialmente cuando uno juega en solitario. Esto se debe a la poca variedad de enemigos que intentarán acabar con nuestras vidas pero, por encima de todo, a los pocos jefes finales que nos desafiaran después de completar las oleadas de la horda, ya que en total únicamente hay dos distintos: El Patriarca y el "Doctor hans Volter". Eso sí, por lo que respecta a los mapas, nos encontraremos con multitud de mapeados de dimensiones variadas, así como con una ambientación y diseño muy diferenciado entre ellos. Además, en cada uno de ellos hay escondidos una serie de coleccionables que aporta un toque extra al juego, más allá de matar un enemigo tas otro.

Técnicamente el juego es correcto, pero nos encontraremos con algunas caídas de framerate notorias y molestas cuando haya muchos enemigos en pantalla y, por consecuencia, muchos disparos, explosiones, etcétera. Además depende el momento del día cuesta algo de tiempo encontrar partida, y nos saltarán algunos errores al seleccionar servidores determinados que pueden obligarnos a cambiar a uno de otra región (más alejada), con el consecuente incremento del ping y con la molestia del lag...

'Killing Floor 2' tiene un precio de venta recomendado de 39,99 euros, y tiene el potencial para convertirse en una apuesta multijugador muy interesante aunque para ello necesitará ir ampliando sus contenidos. Esperemos que con la salida de esta versión para Xbox One, poco a poco vayamos encontrándonos con nuevo e interesante contenido.