Hoy en día está más que olvidado. Pero a finales de la década de los 80 y a principios de la década de los 90 fue muy importante. Puede que, incluso, se convirtiera en uno de los géneros más populares de aquella época: el de los "matamarcianos". No es para menos, teniendo en cuenta que fueron muchas las máquinas recreativas que apostaron por él con mucha gracia y talento. Y, por supuesto, con una gran evolución con respecto a lo visto con 'Space Invaders' en 1978. Desde 'R-Type' a 'U.N. Squadron', pasando por 'Gradius', '1942', o 'Thunder Force'. Y todo sin olvidarnos de propuestas tan geniales como 'Aleste', 'Axelay', 'Parodius' o, por supuesto, la saga que nos ocupa hoy: 'Darius'.
La mejor Taito
Esa franquicia de Taito que no ofrecía nada absolutamente nuevo o rompedor en el género, pero la cual era capaz de coger los mejores elementos del mismo, así como de imprimir a sus obras un carácter único y diferenciado gracias a unas cuantas señas de identidad muy recordadas. Hoy en día, el que todos conocemos como "matamarcianos", es un género extinto. Es verdad que algunos desarrolladores independientes han logrado trasladar ese tipo de propuestas con acierto en el presente. Y tenemos ejemplos tan buenos como 'Super Hydorah'; sin embargo, aquella gran variedad de propuestas ya no volverá. También es comprensible, teniendo en cuenta que eran juegos cortos, basados sobre todo en el ensayo error y en la exigencia propia de aquellas máquinas que, al fin y al cabo, habían sido creadas para que nos gastáramos el dinero con cada nueva partida.
Pero no todo está perdido. Porque una gran forma de recuperar esas sensaciones es lanzando recopilatorios como el que tenemos hoy delante: 'Darius Cozmic Collection Arcade'. Un pack que se encuentra disponible en PS4 y Nintendo Switch desde el pasado 16 de junio de 2020. Aunque, en realidad, tampoco es exactamente nuevo. De hecho, en Japón estaba disponible desde febrero de 2019. Incluso se llegaron a comercializar unas cuantas ediciones de coleccionista en todo el mundo poco después de su lanzamiento original. Ahora, gracias a la gran relación entre Taito y ININ Games (el distribuidor), el juego llega a Europa a través del formato digital (PSN y eShop).
¿Arcade? ¿O consolas?
De todas formas, son dos los recopilatorios que se han puesto a la venta. Solo que son completamente independientes. Por un lado el 'Darius Cozmic Collection Arcade' que analizamos hoy; por otro 'Darius Cozmic Collection Console'. Como sus propios nombres indican, la diferencia radica en los juegos de la saga que contiene cada uno. Mientras el primer pack está centrado en las entregas que llegaron a máquinas arcade, el segundo hace referencia a los distintos 'Darius' que se lanzaron en consolas (Super Nintendo, Mega Drive...). Como decimos, ambos son independientes. Y en ese sentido, cabe decir que sus precios son algo elevados: 39,99 euros la versión arcade y 59,99 euros la de consolas. Como hoy nos centraremos en 'Darius Cozmic Collection Arcade', os dejamos primero con la lista de juegos que trae bajo el brazo el recopilatorio.
- Darius (Arcade, 1986, versión original)
Darius (Arcade, 1987, versión nueva)
Darius (Arcade, 1987, versión extra)
Darius II (Arcade, 1989, versión Dual Screen)
SAGAIA (Arcade, 1989, ver.1)
SAGAIA (Arcade, 1989, ver.2)
Darius Gaiden (Arcade, 1994)
En total, este pack arcade trae cuatro juegos únicos que, junto a algunas variaciones de los mismos, acaba aportando un total de 7 títulos diferentes. Para empezar, tenemos dos variaciones del juego con el que empezó la saga (en 1986), las cuales aportan pequeños cambios en aspectos como la accesibilidad, el comportamiento de los enemigos o la propia dificultad. Asimismo, el recopilatorio aporta una variación de 'SAGAIA', que en realidad también es una versión basada en 'Darius 2'. De hecho, 'SAGAIA' es el nombre con el cual esa entrega fue bautizada en muchos territorios fuera de Japón. Sin embargo, este título es considerado como un juego diferente porque aporta también cambios notables. Por ejemplo, tiene un nuevo mapeado y un selector de rutas distinto.
Las señas de identidad
Y son precisamente esas rutas las que nos llevan a hablar de las dos grandes señas de identidad de la franquicia 'Darius'. Elementos presentes en absolutamente todos los juegos de este recopilatorio, por otra parte. ¿Por qué hablamos de rutas? Muy sencillo: cada vez que terminamos un nivel (casi en todos los niveles), aparecerá una bifurcación en el escenario. Y será nuestra la elección de qué camino tomar. De esa forma, si el juego empieza en la fase A, al terminarla será posible elegir entre B o C. Y, al mismo tiempo, eso abrirá nuevos caminos después. Siguiendo con el mismo ejemplo, si elegimos la ruta B, luego solo estarán disponibles las fases D y E; en cambio, si elegimos la C, podremos escoger después entre E y F.
Lo mejor de todo es que esas elecciones no son meramente estéticas. Porque el juego tendrá el mismo número de fases siempre (normalmente 7), pero el camino que pasemos hasta llegar al final, los niveles, o incluso los jefes finales de cada nivel, pueden variar en función de esas elecciones. Es un elemento distintivo que fomenta mucho la rejugabilidad y que, cuando se disfruta del título con amigos, aumenta considerablemente la diversión. La otra gran seña de identidad de la saga tampoco se queda corta: la ambientación. Aunque todo el juego tiene un aire a ciencia ficción evidente, con el espacio y diferentes planetas como grandes protagonistas, destacan los enemigos. Siempre relacionados con el ámbito marino. Peces de todo tipo, tortugas marinas, calamares gigantes, pulpos enfadados... Pero siempre, con ese estilo espacial y en forma de naves que le dan un toque único. Muy chulo, ya que es como navegar por un mar lleno de estrellas.
Acción frenética y... exigente
A partir de ahí, y como decíamos al principio, no hay muchos secretos. Cualquiera de los 'Darius' del recopilatorio funciona de manera muy similar al 90% de los juegos del género matamarcianos. Y eso implica tanto las grandes virtudes, como música de escándalo, cooperativo a dos, acción frenética y un gran placer al disparar contra cientos de enemigos, como los posibles defectos. En este último caso, con aspectos como una duración muy limitada, una dificultad excesiva en ocasiones o una falta de modos de juego que permitan alargar la experiencia más allá de la propia rejugabilidad. Aún así, cabe decir que Taito se ha esforzado mucho en presentar una serie de añadidos para este recopilatorio que facilitarán mucho las cosas.
Desde la posibilidad de elegir la dificultad, hasta poder manipular el número de vidas y de continues que tenemos. Además, cuando perdamos todas las vidas y usamos un continue, será posible volver a sumar un nuevo continue si queremos. Y así tantas veces como sea necesario, permitiendo a los jugadores disfrutar de los juegos sin tenerse que preocupar por morir. Y todo esto se hace de forma muy natural, con un solo botón del mando, y como si se tratara de un gesto según el cual el jugador pone otra moneda en la recreativa. De todas formas, no todos los juegos de la colección funcionan igual en cuanto a nivel de exigencia. Sin ir más lejos, se nota mucho que el primer 'Darius' es el más complicado. Ya no solo porque los check points en los niveles son prácticamente nulos; también porque si te mata un jefe (y aunque te queden vidas), tienes que empezar la batalla contra ese jefe desde el principio. Algo que no ocurre en el resto de juegos. Eso sí, este pack permite grabar y cargar partidas en todo momento, como en cualquier emulador que se precie.
Una progresión notable
También vale la pena detenerse en algunos detalles que ayudan a definir la progresión de la saga en máquinas recreativas. Ya hemos comentado que el primer 'Darius' es el más duro de todos, pero cabe decir que sigue siendo tremendamente disfrutable a día de hoy. Y se mueve de forma vertiginosa, como los demás. Eso sí, gráficamente sufre más, ya que tenemos que utilizar un marco más pequeño (lo cual puede ser un problema en el modo portátil de Switch según han comentado algunos usuarios). En cualquier caso, ya en el primer juego encontramos elementos jugables muy divertidos como la posibilidad de conseguir distintos power-up que van desde una mejora del disparo general o de las bombas, hasta el mítico —y estiloso— escudo de la saga.
A partir de 'Darius II' empiezan a llegar una serie de mejoras que la verdad es que le sentaron de maravilla a la franquicia. Desde un sistema de power up redefinido, con el que hace falta derrotar a toda una oleada de enemigos para conseguir las mejoras, hasta poderes completamente nuevos como el láser (funciona de forma parecida a las bombas, atacando en vertical) o, incluso, la inclusión de pequeños jefes de mitad de nivel. Lo mejor de todo, no obstante, es el apartado gráfico. Probablemente, de lo más potente que se pudo ver en pleno año 1989 y una auténtica pasada (no solo en lo artístico). Todos esos cambios se mantienen en 'SAGAIA', para explotar definitivamente con 'Darius Gaiden'. Este último, el juego más vistoso de la saga. Aportó tecnologías más punteras para conseguir un scroll más suave y, además, visualmente es bastante espectacular gracias a elementos como la rotación de sprites y efectos 3D que se notan especialmente en los jefes finales.
La diversión, ante todo
En definitiva, todos los juegos que forman parte de este recopilatorio, cada uno con fases más o menos inspiradas y pequeños elementos que los hacen destacar por encima del resto, tienen algo en común: son tremendamente divertidos. Es una auténtica lástima que no se haya habilitado servidores para jugar online. Y aunque sí que podemos disfrutar del multijugador en compañía de un amigo en el cooperativo local, habría sido un gran punto a favor. Sobre todo para justificar el precio tan elevado que tiene la colección. En cualquier caso, 'Darius' viene cargado de contenidos interesantes que aprovecharán los amantes del género: modo práctica en muchos juegos, posibilidad de ver tus repeticiones y bajar la de otros jugadores, muchos trofeos y un largo etcétera.
Además, cabe destacar que el recopilatorio funciona con un rendimineto exquisito. Prácticamente perfecto, diría. Es uno de los pocos juegos con los que vas a estar jugando a los pocos segundos de iniciar tu PS4. No hay tiempos de carga, los menús son claros y bonitos y todo está dispuesto para que nada pare ese frenetismo tan adictivo de cada uno de los títulos. Por si fuera poco, el grado de configuración de esta emulación es verdaderamente sorprendente. Por ejemplo, para decidir qué vemos en la interfaz o para aplicar distintos filtros. Eso sí, no habrían sobrado algunos extras como arte del juego, poder escuchar la banda sonora, algún vídeo con los desarrolladores... En definitiva, si eres amante de los matamarcianos y nunca has jugado a un 'Darius', este recopilatorio es imprescindible. Si ya los has jugado, también; pero su precio no justifica lo que ofrece. En cualquier caso, 'Darius Cozmic Collection Arcade' te enamorará por su genial banda sonora y su explosiva jugabilidad, casi a la velocidad de la luz.