Ha llegado el momento. El próximo 15 de febrero llegará a las tiendas 'Crackdown 3' – en exclusiva para Xbox One y Windows – después de numerosos retrasos, y épocas de sombras y dudas donde no sabíamos absolutamente nada sobre el devenir del juego. Seguramente el desarrollo del título no ha sido el ideal, pero finalmente Sumo Digital ha recuperado este explosivo sandbox para la causa, y lo ha hecho brindándonos un producto que convencerá a los seguidores de la serie. Estamos delante de un videojuego que no busca romper con su pasado, al contrario, busca reafirmar una fórmula propia repleta de acción y diversión. ¿Lo habrán conseguido? Acompañadnos en este texto para salir de dudas.
Una apuesta por la sencillez
Al iniciar la campaña del juego todo hace indicar que en esta ocasión se ha querido dotar a la trama principal de una mayor carga argumental, con personajes más carismáticos y un argumento más sólido. Lo cierto es que, si se nota algo esta mejoría, pero con el paso del tiempo vas viendo que la sucesión de acontecimientos es más precipitada y menos fluida de lo esperado. Además, pese a contar con una trama principal más estructurada, la forma en la que progresa el jugador enfrentándose a los distintos jefes hacen que el hilo conductor sea algo más difuso. Pese a todo, preparaos para vivir situaciones de máxima tensión y momentos bastante divertidos.
Jugablemente los agentes cuentan con una serie de mecánicas muy básicas que van mejorando a medida que jugamos, y consiguen que cada vez sea más y más divertido utilizarlas. Por ejemplo, para mejorar nuestra conducción necesitamos superar pruebas al volante de un coche, para saltar más debemos recoger los clásicos orbes de agilidad o al utilizar golpes cuerpo a cuerpo, armas de fuego y/o explosivos aumenta la potencia de nuestros ataques. De hecho, esto hace que resulte atractivo cumplir las tareas secundarias para probar nuestras habilidades y seguir mejorando.
Aquellos que hayáis jugado a 'Crackdown' o 'Crackdown 2' veréis también como los enfrentamientos con los enemigos no han variado mucho. ¿Qué quiero decir con esto? Principalmente dos cosas. La primera es que seguiremos contando con un importante sistema de autoapuntado que nos permitirá pasar rápidamente de enemigo en enemigo sin perder tiempo ni munición; al mismo tiempo que la inteligencia artificial de estos no supondrá un reto realmente importante. Eso sí, cuando juguemos en la máxima dificultad deberemos tener algo de cuidado con las hordas de enemigos ya que, aunque cuenten con un comportamiento kamikaze, causarán estragos en la salud de nuestro personaje.
Las dimensiones del mapa de 'Crackdown 3' superan con creces las que hemos visto en la saga hasta ahora; pero este sigue teniendo un toque clásico. Esto se debe principalmente al tipo de contenido que nos ofrece, tareas que no tienen una carga argumental trascendente y que sirven para mejorar nuestras habilidades, desbloquear bases desde las que reaparecer, desbloquear nuevos personajes para jugar, etcétera. De este modo, aquellos que disfruten de su propuesta pueden exprimirla algo más, mientras que aquellos que no estén muy convencidos pueden centrarse en las misiones principales.
Haciendo bandera de la destrucción
Desde que se mostro al público por primera vez, el gran reclamo de 'Crackdown 3' – o uno de los elementos que lo hacia más especial – era su único sistema de físicas que aprovechaba Azure – la tecnología conocida como la nube – para ofrecer unos escenarios destruibles realmente imponentes. Finalmente, esta función quedo reservada para la faceta multijugador del juego, Wrecking Zone, una modalidad que esconde un gran potencial pero que todavía se encuentra en un estado embrionario.
La premisa del modo Zona de Demolición es bastante simple, y se basa en enfrentar dos equipos de cinco agentes cada uno en un duelo que tiene lugar en un escenario que, poco a poco, irá destrozándose a medida que hacemos gala de todo nuestro arsenal de ataque. Aun así, el sistema de físicas está lejos de aquello que nos enseñaron en la Gamescom de 2015, pero nos permitirá deleitarnos viendo como caen edificios enteros al destruir puntos clave de la edificación. El mayor pero que le pongo al competitivo es que mantiene los vicios jugables de la campaña – principalmente pienso en el autoapuntado – algo que resta valor a la habilidad que debe tener el jugador a los mandos. Sin olvidarme que, actualmente, es imposible jugar con amigos, ya que no existe la posibilidad de crear un grupo antes de buscar partida.
Lo cierto es que con vistas al análisis no he podido jugar todo lo que me gustaría al multijugador, ni tampoco en las mejores condiciones técnicas, pero la experiencia ha conseguido dejarme un buen sabor de boca. Si a esto le añadimos que la desarrolladora va a seguir trabajando en mejorar este modo, todo ello me hace ser optimista con vistas a lo que pueda depararnos el futuro.
Un acabado singular
Incluso cuando nos detenemos a hablar del apartado técnico de 'Crackdown 3' el título sigue generándome sentimientos encontrados. Con esto no quiero decir que el acabado sea malo, de hecho, hay aspectos que me han sorprendido muy gratamente, sino que esperaba que fueran más lejos de lo que han ido. Por ejemplo, las cinemáticas de la historia me parecen realmente espectaculares, y una vez estamos jugando los moldeados de los agentes, el acabado de los lugares más emblemáticos de New Providence, efectos visuales como las explosiones o una paleta de colores realmente llamativa consiguen trasmitirte ganas de recorrer los rincones de la ciudad. Al mismo tiempo, algunas animaciones de nuestros agentes, el comportamiento de los enemigos o la repetición de algunos acabados (enemigos, objetos, etc.) acaban restándole un punto de brillantez a esta faceta. Además, algunas mecánicas jugables como la conducción todavía podrían seguir mejorando, aunque lógicamente resulta mucho más agradable, y satisfactorio, conducir un vehículo ahora que en anteriores entregas.
El apartado sonoro merece una mención especial, y es que el doblaje al inglés es sublime, y más de una cinemática conseguirá esbozarte una sonrisa en la cara. Además, lejos de lo que algunos podían temer, el juego llega con subtítulos al castellano, así que la barrera del idioma no será ningún impedimento para disfrutar de 'Crackdwon'. Eso sí, me ha sorprendido la diferencia que hay en el tamaño de los textos que se muestran en las escenas de vídeo, y los que se muestran mientras jugamos (estos últimos son mucho más pequeños). Aunque el sonido que más os acompañará en vuestra aventura serán los disparos y las explosiones.
Por último, me gustaría hablar un poco del rendimiento de 'Crackdown 3'. Este análisis lo he realizado jugando en Xbox One X, y la consola premium de Microsoft ofrece un resultado muy fino. El framerate se mantiene sólido y constante en todo momento, incluso en los grandes momentos de estrés donde se juntan una gran cantidad de enemigos mientras encadenamos saltos, golpes, explosiones y disparos. Además, si disfrutáis del juego en un panel 4K veréis como destacan elementos como la iluminación, las texturas... El resultado es especialmente llamativo cuando visitamos edificios o pasamos junto a elementos estéticos de colores llamativos. Tampoco hemos padecido bugs o problemas técnicos que afectaran negativamente a nuestra experiencia de juego.
Conclusiones
En definitiva, después de haber jugado a 'Crackdown 3' tengo muy claro dos cosas. Estamos delante de una propuesta que no conseguirá atrapar a todos los jugadores, pero no me cabe la más mínima duda de que todos aquellos que decidan darle una oportunidad – sabiendo que no estamos ante un juego perfecto – disfrutaran de una experiencia distinta a lo que acostumbramos a ver. Del mismo modo, aquellos usuarios de Xbox que en su momento jugaron a las dos primeras entregas encontraran un juego totalmente reconocible, que mantiene todo lo bueno que disfrutamos en el pasado, pero, al mismo tiempo, también algunos de sus puntos negros.
Las animaciones de los personajes, la inteligencia artificial de los enemigos, la variedad de misiones... Estos son solo algunos de los aspectos que siguen teniendo un importante campo de mejora con vistas al futuro, y es que las sensaciones globales que trasmite esta tercera entrega es la de estar jugando a un título de principios de la generación pasada, pero con un acabado mucho más vistoso y acorde a 2019. Especialmente me ha sorprendido positivamente el acabo del juego en 4K gracias a Xbox One X; al mismo tiempo que consideró que tiene un as en la manga con su vertiente multijugador: Wrecking Zone. Aunque para ello será necesario que vayan solucionando y corrigiendo algunos aspectos como la imposibilidad de jugar con amigos.
Pese a todo lo comentado anteriormente, desde estas líneas os invito a que le deis una oportunidad a 'Crackdown 3' – recordad que el mismo día de lanzamiento estará disponible en Xbox Game Pass –, especialmente si tenéis intención de jugar la campaña cooperativa con vuestros amigos. ¿Por qué? Muy sencillo; porque cuanto más juegas mejor te lo pasas ayudando a la Agencia a reestablecer el orden junto a tu agente, todo ello gracias a como van mejorando sus habilidades, tanto en el combate cuerpo a cuerpo, en el uso de armas de fuego o en sus capacidades atléticas (por citar algunas de ellas).