Puede que Konami nos esté ofreciendo una de cal y otra de arena en los últimos tiempos. Pero también es innegable que algo ha cambiado en ella. La hemos visto publicando grandes recopilatorios en poco tiempo, devolviendo a la palestra personajes como 'Bomberman' con gran gusto, o incluso atreviéndose con reinventar alguna de sus franquicias más añejas. Es el caso que nos ocupa hoy, con este 'Contra: Rogue Corps'. Un juego que, si bien no ha salido tan bien parado como esperaban los fans más acérrimos de la saga, tampoco hay que menospreciar, pues viene cargado de grandes ideas e intenciones.
Medio nostalgia, medio revolución
De hecho, lo primero que hay que destacar, es la valentía de Konami a la hora de cambiar la perspectiva de la saga, cuando en el pasado eso no había funcionado. Y, sinceramente, no funciona mal aquí. Es más; ni siquiera es uno de los motivos que, como veremos, lastra un poco la experiencia final. Más allá de que a nivel técnico puede parecer un juego de la generación anterior, por momentos, la estética y el desarrollo 3D le sientan bastante bien. Es lo que más puede alejar a algunos jugadores habituales de la saga cuando las imágenes no entran por los ojos, pero cabe decir que es uno de esos juegos que mejora enormemente cuando lo ves en movimiento. Aparte de que a nivel jugable, no acaba resultando un experimento tan distinto, al fin y al cabo.
En cualquier caso, 'Contra: Rogue Corps' intenta, constantemente, combinar la nostalgia y la esencia más pura de la saga, con ideas nuevas. Todas ellas, basadas no solo en el conocido género de los twin-stick shooter (sin acercarse en ningún momento a la maestría de Housemarque), sino también en un sistema de loot que intenta darle algo de profundidad a la aventura, con la constante sensación de tener que mejorar nuestras habilidades y nuestro equipamiento para poder progresar. Algo que, desde mi punto de vista, lastra un poco la experiencia, al cambiar por completo el motivo por el cual el juego resulta "difícil". Pero vamos por partes.
Avanza y elimina
Como decíamos, a pesar de esa perspectiva 3D, que va cambiando en función del escenario (unas veces es scroll tradicional, en otros la visa es isométrica...), el juego tiene la misma premisa que ha hecho grande a la saga: avanzar y disparar a todo lo que se mueve. Y la verdad es que divierte, porque aparte de la acción frenética, tenemos algo de plataformas, momentos que homenajean a los juegos originales con cambio de vista incluida, o incluso grandes batallas contra jefes finales. Estos últimos, por ejemplo, son de lo mejor que tiene el título, con enemigos con patrones muy currados y diseños tremendamente originales. El problema, y es otro ejemplo de grandes ideas lastradas, es que esos jefes son más bien escasos.
Además, no se puede decir lo mismo de los enemigos normales, que se repiten hasta la saciedad y cuyos diseños son bastante genéricos. Algo poco comprensible, por otra parte, teniendo en cuenta que el argumento de este juego nos habla sobre un futuro muy lejano en el que los mutantes y los alienígenas campan por el mundo a sus anchas. Y más teniendo en cuenta que el diseño de los cuatro personajes principales es verdaderamente acertado (aparte de cómico). Hablando de los personajes, el juego nos permite elegir el que queramos antes de afrontar cada nivel. El problema, nuevamente, reside en que esas diferencias que encontramos inicialmente entre ellos, se van diluyendo a medida que hacemos uso de ese sistema de loot.
Pura estética
En otras palabras, acaba siendo más una cuestión estética que algo profundo que te obligue a escoger un personaje en función de los retos que se presentan. Lo más interesante, sin embargo, es que cada uno tiene sus propias habilidades especiales (animación incluida), y aparte de devastadoras son realmente cómicas y divertidas. Aunque por cómica la propia historia, que va siendo contada a través de viñetas de cómic con un diseño impecable y que gustará mucho a los fans de la saga, por ese humor negro tan marcado que siempre la ha caracterizado. No es un argumento que vaya a aportar nada nuevo a la industria, pero sí está presentado de manera que sorprenda al jugador y este se quede pegado a la pantalla con cada nueva escena.
Volviendo a la jugabilidad, hay que hablar de la dificultad y todo lo bueno —y malo— que eso conlleva. Los que estén buscando un reto a la altura de los juegos originales, lo encontrarán. El problema es que, si jugáis solos (el juego permite cooperativo para hasta cuatro jugadores, cada uno con un personaje), la virtud se convertirá en un defecto. Me explico. Tanto en los 'Contra' originales como aquí, la dificultad reside en lo mismo: hasta que no aprendemos cada parte del nivel y los patrones de los enemigos, vamos a morir muchas veces. La diferencia es que, mientras en aquellos juegos, repetir un nivel no era tan frustrante, por lo arcade que resultaban, aquí se hace más pesado. Y si jugamos solos, moriremos muchas veces. Muchísimas. En otras palabras, repetir un nivel donde todo el rato disparamos y saltamos no se hace tan repetitivo; en cambio, repetir un nivel donde hay que volver a pasar un tramo en el que solo caminamos... blanco y en botella.
Nada de procedural
Por eso, aunque considero que está bien que cada nivel del juego sea siempre el mismo, dada la naturaleza de este 'Rogue Corps', habría venido bien que las pantallas se generaran de manera procedural. Sobre todo porque, al fin y al cabo, el diseño de estas tampoco es especialmente brillante. Una vez más, insito: si jugáis acompañados lo notaréis menos, porque no tendréis que repetir un mismo nivel mil veces. Pero si jugáis solos, os dará mucha rabia tener que repetir la primera mitad de un nivel, que no tiene dificultad, para volver a caer en la parte final del mismo. Además, no son niveles precisamente cortos, de manera que la repetitividad acaba haciendo mella pronto. Más teniendo en cuenta que hay oleadas infinitas de enemigos.
Por otra parte, aunque el sistema de loot es atractivo, con una gran cantidad de menús en los que mejorar nuestras habilidades y no solo las armas (además, con conexiones con el argumento bien trabajadas), la verdad es que también está lastrado por algunas ejecuciones cuestionables. Por ejemplo, porque los menús son demasiado complejos y liosos para una saga que, al final, encuentra su mayor virtud en la accesibilidad y la inmediatez. Además, vuelve a ocurrir lo mismo que con la dificultad: si jugamos solos, nos costará más conseguir dinero y todo lo necesario para mejorar, y por lo tanto, progresaremos muy lentamente, teniendo que repetir niveles si no queremos volver a morir 10 veces en el siguiente. Como hemos dicho, jugando con amigos, esto mejora enormemente.
Sin noticias de Gurb
Y aquí viene el que es, probablemente, el mayor problema de todos. 'Contra: Rogue Corps' es un juego muy divertido si realmente disponemos de otros 3 amigos con los que jugar toda la aventura. De eso no me cabe la menor duda. Pero... ¿y si no tenemos a tres personas disponibles para el cooperativo local? Entonces lo tenemos crudo. Sí, hay online, pero está completamente desierto, incluso desde el lanzamiento del juego. Y un online que empieza así, está destinado al fracaso. Es una verdadera pena, porque aparte de poder disfrutar de la aventura en compañía, el juego también incluye un montón de modos de juego competitivos que, apenas hemos podido probar para el análisis. Y, nuevamente, repletos de buenas ideas que acaban lastradas por un problema "externo".
Como decíamos, el apartado técnico es muy discreto. Aunque más allá de una iluminación pobre o unas texturas borrosas, sí ofrece momentos en los que brilla un poco. No solo por esa estética de cómic de las escenas de la historia, sino también por los cambios de plano que se realizan en tiempo real durante el nivel, algunas animaciones de los personajes principales, o el diseño de los jefes finales. Al menos, sí podemos decir que la banda sonora está a la altura. Las voces en inglés son de gran calidad, y la música está a la altura de la saga, pero sin llegar a destacar como en las mejores entregas de la misma. Eso sí, tened en cuenta que nos han colado la traducción del español latino. No entorpece la experiencia, en absoluto, pero puede chocar si no se sabe de antemano.
Conclusiones
En definitiva, 'Contra: Rogue Corps' es un juego de acción divertido e incluso adictivo cuando nos ofrece sus momentos de acción más disparatados. Tiene muchas de las virtudes de un buen twin-stick shooter y también algunas de las señas de identidad de la saga. Sin embargo, todas esas buenas ideas vienen lastradas por una experiencia que parece haber sido diseñada para el multijugador a cuatro personas. Y está muy bien si tienes con quien jugar a nivel local, pero muy mal si vas a intentar buscar gente con el online, vacío como pocas veces hemos visto. Por otra parte, su componente de exploración, las plataformas o su sistema de loot le dan algo de profundidad, pero también hacen que el juego pierda chispa, dejando de lado el frenetismo que ha hecho grande a la saga. Además, la repetitividad hace que el jugador se frustre y no encuentre alicentes para seguir avanzando. Le falta algo de chispa a nivel creativo, con un diseño de niveles que ofrezca algo más que disparar. Simplemente correcto, ya sea como 'Contra' o como título del género.