El café es algo que se ha posicionado como un elemento indispensable en nuestras vidas a través de los años. Suena a una broma, pero si nos detenemos a pensarlo se encuentra en el un centro sobre el que gravitamos con mucha frecuencia. Quizás no a nivel individual: hay gente que no es capaz de soportar tanta amargura y lo potente que puede ser su sabor, y bien por ellos. Pero entendemos esta sustancia como el centro de reuniones sociales, la bebida con la que relajarnos en un descanso del trabajo para recargar energías o como aquella perfecta para alargar una buena charla con familiares tras un banquete.
Con ese planteamiento surge 'Coffee Talk', un juego independiente que nos pone en la piel de un barista sin objetivo alguno más que satisfacer a tus clientes... Hacerlo bien, eso sí. La clase de bebidas que entregues, la satisfacción del cliente y las conversaciones adecuadas pueden tener consecuencias de tamaño inimaginable. Una sola gota puede agitar el mundo y dejar la marca a través de aquellos a los que salpica. La clave está en disfrutar del momento de descanso, la calentita taza y más importante, la compañía de la que degustamos.
Fantasía y café van unidos de la mano
El mundo de 'Coffee Talk' no es uno demasiado diferente al nuestro. Humanos y criaturas mágicas como elfos u hombres lobo conviven en su día a día; sí, no es algo que nosotros veamos habitualmente por la calle, pero las similitudes entre ambos universos se aprecian en cada conversación, cada pequeño problema destacado, los periódicos que hablan de política y enfermedades que atraviesan barreras.
La trama real de este título se encuentra en las conexiones que establecen nuestros clientes, los diálogos casuales que surgen alrededor del café que servimos a cada uno de ellos. Da igual que sea porque sencillamente han parado por la zona para recargar energías o porque han quedado como lugar íntimo y personal: esta cafetería actúa como nexo de unión de todos los corazones que se pasan por ahí y es su propio protagonista. Te hace detenerte a apreciar con más cariño los lugares que visitas y los aromas que respiras, te hace preguntarte de qué hablará la pareja que cada mañana se acerca tras pasear al perro. O, lo más importante: te hace darte cuenta de que quizás abrirte a esa gente te haga crecer en los puntos débiles que necesitas reforzar.
No creo que 'Coffee Talk' necesite reforzar su trama con una mayor implicación de lo que hay tras las paredes de la cafetería, al contrario que otros juegos de mecánicas semejantes. Sin embargo, sí lamento que el número de clientes sea tan reducido como lo tenemos en el juego. Quizás una o dos semanas más de duración le haría un favor para poder ampliar el repertorio de personajes que conocer, apreciar más interacciones con los personajes ya establecidos y hacer crecer nuestro pequeño universo social.
Un café en una taza pequeña
El gran problema de toda la experiencia con 'Coffee Talk' es su escasísima duración. Cada día de clientela se hace muy corta y, para cuando estamos listos para conocer más clases de seres mitológicos y problemas cotidianos que se asimilan a los de nuestra vida diaria... Se acaba. El personaje central de la narrativa termina en un tiempo récord su objetivo y con ello no hay más razones para ver qué más está pasando o cómo las relaciones entre algunas personas han evolucionado. Damos un pequeño salto temporal hacia adelante para el epílogo y con eso el título espera completar su historia.
Es un café de sabor muy intenso aunque servido en una taza minúscula. Sí, es una bonita taza de porcelana china hermosa para exponer: es un juego increíble de ver y muy fácil de apreciar con su cuisadísima estética y HUD perfectamente implementado, pero el problema sigue ahí. Lo minimalista sirve de exposición, no como un objeto de uso recurrente. De ser este un primer episodio de algo más grande sería fácil pasarlo por algo por dejar un perfecto sabor en la garganta mientras esperamos a más, pero como título individual y auto conclusivo se queda muy corto. Necesitamos más café en nuestras venas.
Para acompañar tan delicioso café hacen falta unas buenas pastas, y lo tenemos en modo de un modo extra que nos reta a servir bebidas bajo ciertas condiciones en un tiempo límite. Es un modo desafío que nos es muy útil para aprovechar los ingredientes a nuestra disposición, conocer un poco lo que podemos hacer con nuestra máquina e incluso aprendernos de memoria ciertas recetas que luego podemos investigar y probar a recrear en la comodidad de nuestro hogar. Es un buen extra que podemos echar de menos en otros títulos y que le faltaría añadir marcadores online para desafiar a amigos y otros jugadores, aunque también de implementarlo tendría que evitar lo fácil que se puede explotar con el botón de pausa.
Tono lo-fi para ese suave café moreno
Algo que todos los jugadores deberían dedicarle un momento es a su banda sonora. Ya hemos destacado ese HUD increíble y lo bien cuidados que están los personajes artísticamente hablando, pero lo que termina de embriagar el resultado final es el tono lo-fi de su banda sonora. Cada tema incluido, cada tema que suena nos incitan a relajarnos y tomarnos con calma la vida. Calentar un café y poner la banda sonora compuesta por Andrew Jeremy se puede convertir en una tradición peligrosamente recurrente que nos ayuda a cerrar los ojos y respirar. Dejar las preocupaciones, desconectar, subir el volumen de los cascos. Para la clase de juego que tenemos entre manos, el número de composiciones musicales es perfecto y redondo.
Es raro detenerse a decir que igual lo mejor que podemos hacer como jugadores es ir a la tienda y comprar la banda sonora de 'Coffee Talk' sin probar antes la propia obra a la que está representando, pero no encuentro una manera mejor de aplaudir el magnífico trabajo que Toge Productions y Andrew Jeremy han hecho juntos aquí. Start it over me hace despreocuparme de las imperfecciones que cometo en vez de pararme a corregir un texto tres veces más antes de pasar al siguiente párrafo, Moon bright me da el sueño que necesito cada noche para dormir tranquilo y dejar de pensar en el trabajo. No había mejor opción en el apartado sonoro, que destaca también por esos momentos en los que enciendes la cafetera y dejas que el chorro de agua hirviendo llene la taza.
Conclusiones
'Coffee Talk' es una muy grata experiencia, una que te deja con un buen sabor de boca y una sensación de calma y relajación que pocos títulos te pueden dar. Se queda clavado en la memoria por unos días más y puedes añorar y apreciar las características de su café, aprender de su mensaje e incluso de sus mecánicas. Tiene una presentación impecable que lo hará memorable para muchos jugadores, como un recuerdo especial que guardamos con cariño. Pero es excesivamente corto, demasiado para la clase de título que quiere ser. En apenas dos o tres horas podemos acabar la historia, y el número de personajes con el que conectamos es muy bajo como para quedarse clavado de verdad en la memoria. No es un problema de calidad el que tenemos entre manos, es uno de cantidad: a veces la duración sí que importa para llegar al corazón. Ojalá veamos una secuela con el doble de días para quitarnos este punto amargo del paladar.