REVIEW

Análisis 'Cobalt' - Enfrentamientos en tiempo bala

Este es el simpático y original título que nos llega de las manos de Mojang, creadores de 'Minecraft'. ¿Está a la altura?

Por Álex Pareja 9 de Febrero 2016 | 10:48

Mojang siempre será conocido como el estudio desarrollador de 'Minecraft', que no es precisamente poco, ya que este título se ha convertido en uno de los mayores éxitos de la historia de nuestra industria. Sin embargo, también se dedican a otros menesteres, como los de distribuir distintos juegos que para ellos cumplen con esa esencia que parece imperar en esta empresa: ideas sencillas pero bien aprovechadas.

'Cobalt' cumple con esas características, desde luego, aunque en realidad no tiene nada que ver con 'Minecraft' o con otros juegos del estilo. De forma rápida podríamos decir que es un juego en dos dimensiones que mezcla las plataformas y los disparos, unido a elementos como el tiempo bala para hacerlo mas espectacular. Una mezcla de conceptos que finalmente configuran un juego con mucha personalidad propia, que sorprende desde el primer minuto por aglutinar muchos elementos diferentes en un mismo conjunto.

Modo historia, diversos modos multijugador y más opciones diferentes que siempre aprovechan las mismas mecánicas. Es un juego sencillo, que parece que puede llegar a contentar a todos aquellos que sepan disfrutar y aprovechar esas mecánicas tan sencillas, que son las de simplemente saltar, rodar, disparar y proyectar los disparos enemigos. Al principio seremos unos auténticos ignorantes de 'Cobalt', incapaces de saber que bajo ese cascarón hay muchas más opciones que realizar de lo que en un principio parecería.

'Cobalt' tiene modo historia

Si nos adentramos en el modo historia nos daremos cuenta de ello, con varios elementos que chocan con lo que en un principio podríamos esperar de un título de estas características, tan sencillo como parece a primera vista. Una historia, conversaciones en las que incluso podemos decidir lo que decir, puzles, enfrentamientos con distintos tipos de enemigos, muchos escenarios diferentes... variedad y cantidad, siempre, aprovechando las mecánicas sencillas en todo momento.

'Cobalt' sabe destacar, y nos propone avanzar por la historia otorgándonos bastante poca información. Que sea el jugador el que vaya descubriendo las posibilidades que le ofrecemos, parece ir susurrando el juego a nuestras espaldas. Y en cierto sentido es una sensación tremendamente agradable: cuando descubrimos cómo cambiar de arma, cómo obtener los materiales de los enemigos, coger objetos, lanzarlos, esquivar, repeler los proyectiles enemigos... todo se va descubriendo de forma natural, sin que tengamos que enfrentarnos a todas las acciones de golpe.

También ocurre con los puzles, que deberemos superar para seguir avanzando por los escenarios. Abrir una puerta o un armario, por ejemplo, será común y habitual. Los puzles te dirán cómo deben superarse pero la mayoría son fáciles de entender. Lo complicado está en encontrarse con alguna situación que realmente no sabes cómo solventar, al descubrir además que no hay una explicación al respecto, pero bueno, al final es la forma en que se ha querido plantear la historia de 'Cobalt'.

Sin embargo, el modo para un jugador va perdiendo bastante fuelle conforme seguimos avanzando. Una vez que ya hemos conocido todos los movimientos a realizar, que ya nos sentimos cómodos por los escenarios, lo único que realmente plantea un reto es seguir acabando con enemigos o ir solventando puzles. Lo peor, es que el control no parece estar realmente adaptado para algunas de las situaciones que se nos plantean. A veces, para que me entendáis, se hace realmente complicado superar una zona sin que nos vean. Fracasaremos, nos matarán, pero tampoco importará demasiado porque siempre tendremos un punto de control a mano.

El "juego de oficina"

Parece claro que las mecánicas se han adaptado, más bien, para ser aprovechadas en el modo multijugador, que realmente es lo que comenzó siendo la esencia de 'Cobalt' desde un principio. Tal y como me comentaron sus propios creadores en la pasada Gamescom, donde tuve la oportunidad de probar el juego junto a ellos, es un título creado "para ellos mismos". Un juego pensado para que los propios desarrolladores descansaran en el trabajo echando alguna que otra partida rápida de competición entre ellos. Y desde luego, pensar en el juego de esa manera te proporciona un prisma de opinión muy diferente.

Si valoras a 'Cobalt' como un juego al que acudir de vez en cuando, para esos ratos muertos en la oficina, te encuentras un título muy divertido. Realmente se descubre en el modo multijugador, bien sea a nivel online o local: está pensado para realizar partidas rápidas, entretenidas y frenéticas, que sí que aprovechan al máximo las posibilidades y mecánicas que han decidido incluir.

Además, los distintos modos de juego le proporcionan la variedad suficiente como para que no resulte reiterativo, al menos durante las primeras horas. Al final todo se resume en acabar con los enemigos rivales utilizando las armas que tenemos a nuestro alcance, pero todo resulta bastante espectacular cuando el tiempo se detiene y debemos evitar un disparo con un rápido movimiento, o cuando aprovechamos para hacerlo rebotar y que el enemigo, a pesar de reaccionar, acabe destrozado gracias a nuestro épico movimiento. Y todo en cámara lenta.

Pero no es algo que funcione durante demasiado tiempo. Si entendemos a 'Cobalt' como un título al que echar muchas horas para dominarlo, nos terminaremos cansando, porque no ofrece mucha más profundidad a lo ya mencionado. Resulta divertido, interesante, espectacular, algunos enfrentamientos son tremendamente disfrutables... pero es un juego, como bien dijeron sus propios creadores, para echar un ratito libre y nada más.

El modo para un jugador, a pesar de que está muy trabajado y ofrece un concepto de juego original, no parece aprovechar estas mecánicas de la misma manera que en el modo multijugador. Se nota que los movimientos de nuestro personaje están pensados para enfrentarnos con otros enemigos que puedan hacer exactamente lo mismo. Nos sentiremos como ninjas enfrentándonos a otros ninjas, pero esta sensación se pierde en el modo para un jugador.

Es complicado de dominar, lo que le aporta un plus a nivel competitivo. Hacerse una buena jugada con otros rivales reales siempre alegra, como ver la repetición y comprobar lo bien que nos ha salido. En este sentido, aunque es algo que ocurre también en casi todos los juegos online, depende mucho del nivel que tengan nuestros compañeros, que no siempre será óptimo. Es imposible ganar una partida uno solo, al igual que también es complicado hacerlo frente a un grupo de personas que se nota que han entrenado y se sienten poderosos en cada movimiento.

Por eso 'Cobalt' es un juego entretenido, que desde luego se puede recomendar para todos aquellos que sientan curiosidad por su propuesta, pero que en realidad tampoco aporta mucho más. Es un juego que se siente explotado, que al final ha perdido esa esencia de "juego de oficina" para intentar contentar a todos los frentes y así poder comercializarlo de una mejor manera. A mí no me ha sabido convencer del todo y cuanto más jugaba más me apetecía dejarlo.

Pero es variado y seguro que si llega a tus manos vas a saber encontrar algún modo de juego o alguna razón específica para que puedas llegar a disfrutarlo. 'Cobalt' se adapta, aunque el jugador termine siendo el dominado hasta que se terminan por entender todos sus conceptos, que a veces resultan un poco caóticos sobre todo si nos adentramos directamente al modo multijugador. Si quieres esquivar disparos y repelerlos en cámara lenta, manejando a pequeños robots de aspecto simpático, desde luego que este es un juego pensado para ti. Para todo lo demás, simplemente cumple.