El 24 de June 2019 | 16:00
Recuerdo una época de mi vida en la que no podía parar el ritmo. Era ponerse al ordenador, activar Steam y de repente las horas pasaban volando. Respiraba aquel aroma que la obra de Brace Yourself Games había desarrollado con amor. Un intento más, unas pocas plantas más. Antes de que me diera cuenta ya había echado al menos sesenta horas en seguir un ritmo imposible... Y de ahí ya pasé a consolas y perdí el rastro del número de horas en total. 'Crypt of the NecroDancer' no era una experiencia, era una forma de vivir.
Años más tarde, cuando uno creía estar recuperado y a salvo de la adicción, Nintendo me devolvió a la realidad con un golpe sobre la mesa. No sólo estaba en camino una secuela de uno de los videojuegos indies que más me había enamorado, ¡sino que encima lo hacía en colaboración con la saga 'The Legend of Zelda'! 'Cadence of Hyrule' es un sueño hecho realidad. La composición de las diosas toma forma en este fantástico crossover que no sólo logra revitalizar temas musicales excelsos de por sí, sino combinar la experiencia de juego rítmico con el sentido de aventura y exploración de la franquicia de Nintendo.
Extraños en una tierra conocida
La trama de la aventura es sencilla: Cadence, una de las tres protagonistas de 'Crypt of the NecroDancer', aparece en Hyrule sin saber bien por qué. Y no podría hacerlo en mejor momento, pues de alguna forma el siniestro Octavio ha atravesado también la barrera que separaba sus mundos y ha mandado a dormir a los dos héroes tradicionales de la saga gracias al poder que le otorga el laúd dorado. Tendremos que despertar a uno de ambos y explorar la tierra de fantasía para detener a nuestro mortal enemigo, quien algo planea con el poder de los cuatro instrumentos mágicos ocultos en las diferentes mazmorras de la aventura.
No hay mucho más allá de esto en la historia de 'Cadence of Hyrule'. Nuestra progresión apenas marca el despertar al otro héroe de la Trifuerza que hayamos dejado de lado en el tutorial, resolver algunos de los problemas que los hylianos se han topado durante el breve reinado de Octavio y recuperar los instrumentos. No hay ningún giro narrativo más allá del que todos imaginamos por tratarse de un 'The Legend of Zelda', aunque tampoco lo necesite. Existe, jugablemente, un secreto muy interesante en forma de un cuarto personaje controlable, pero descubrirlo queda en mano de los jugadores.
Cada uno de los héroes sobre los que tomamos control tienen una base similar de control, aunque todos ellos se distinguen por propiedades únicas. Algunas armas permanecen como exclusivas para ellos, y las habilidades asignadas a los botones L y R del mando son únicas y especiales para los tres: Zelda maneja la magia, Link tienen en mano sus técnicas avanzadas de combate y Cadence demuestra su manejo con la pala como nadie más con potentes ataques de frente e incluso la capacidad de abrirse camino más ampliamente que sus compañeros. Acabaremos usando a nuestro favorito más a menudo que de costumbre, pero la verdad es que donde al final acabamos por aprovechar las características de cada uno de ellos y la maestría que llevan consigo es en el modo de un único personaje con la muerte permanente activada. Esta es la manera pensada de verdad para disfrutar de la aventura al completo una vez conocemos las mecánicas y hemos terminado el modo historia.
Más allá de Hyrule
Lo cierto es que 'Cadence of Hyrule' tiene un problema de base al que 'Crypt of the Necrodancer' no tuvo que hacer frente por su propia naturaleza, y es la duración del juego. La dificultad ha sido muy rebajada con respecto al título anterior y gracias a las mejoras permanentes, un gran inventario de objetos que no dejamos atrás al proseguir y un sistema de recuperación de energía mucho más generoso que en la aventura anterior no supondrá ninguna clase de problema para los más veteranos. Los que vengan sin haber jugado esa primera entrega quizás encuentren dificultades para pillar el ritmo en el primer par de horas de juego, pero la curva de aprendizaje es justa para aquellos que quieran aprender. Todo ello lleva a que en apenas 4-6 horas habremos terminado nuestra aventura.
Es muy poco tiempo de juego, especialmente considerando las 20-30 horas de la entrega anterior. Las cuatro mazmorras y zona final del juego se hacen cortas por muy divertidas que sean, y aunque el título se anima a invitarnos a rejugarlo varias veces más lo cierto es que no nos da motivos de peso para ello. Superar otros modos de juego no desbloquea nada ni deja constancia de nuestros logros, con lo que la experiencia obtenida apenas varía. Los mapas se generan automáticamente entre partida y partida, pero apenas se nota a la hora de la verdad pues la estructura permanece casi intacta. No hay cambios tangibles.
Este problema con la corta duración del juego es el mayor problema de peso de 'Cadence of Hyrule', pues se coloca en una situación comprometida tanto para fans de una franquicia como de otra. Para aquellos que vengan de 'The Legend of Zelda', esas pocas horas de juego se sienten excesivamente pocas para el precio oficial marcado para el lanzamiento digital del juego. Para los amantes de 'Crypt of the NecroDancer' no hay una razón para repetir la aventura una y otra vez con el objetivo de superarnos a nosotros mismos siquiera por la poca variedad en los escenarios posibles y la menor dificultad.
Imperfecto, pero maravilloso
Aunque el tema de la duración es un problema que no podemos obviar, lo cierto es que 'Cadence of Hyrule' brilla con excelencia en el resto de campos. Artísticamente es precioso con sus gráficos píxel, y por supuesto la banda sonora es mucho más que magistral: los clásicos temas de 'The Legend of Zelda' de Koji Kondo se ven perfeccionados y alzados a un nuevo nivel con los increíbles remixes del compositor occidental Danny Baranowsky, quien ya se coronó con sus trabajos anteriores en 'Super Meat Boy', 'The Binding of Isaac' o 'Cave Story 3D'. Es lo suficientemente buena banda sonora como para incluirla en nuestra playlist particular de temas recurrentes a escuchar.
También es destacable sacar a relucir que el mundo de Hyrule tiene mucho mundo para descubrir. Además de las clásicas piezas de corazón encontraremos algunos coleccionables interesantes, como semillas deku que nos llevarán a desbloquear un secreto en particular muy jugoso: y por si fuera poco, muchas de las armas y artefactos se encuentran ocultos, esperando a que exploremos lo suficiente. El título se vuelve especialmente interesante para el ámbito del speedrun, donde con una estrategia, un poco de suerte y los objetos adecuados podemos realizar magia estupenda como para saltarnos una mazmorra casi por completo sin ningún esfuerzo. Las posibilidades están abiertas a nuestra imaginación.
Conclusiones
'Cadence of Hyrule' tiene que hacer frente a problemas muy gordos que le impiden alcanzar la excelencia, pero no por ello sus virtudes se ven manchadas. Se trata de un juego particularmente especial, uno que quiere unir lo mejor de dos grupos de jugadores para otorgar algo nuevo y familiar al mismo tiempo. Con el apoyo de algunos parches y DLC posteriores quizás logre convertirse en el producto redondo al que aspira.
Lo mejor:
- Banda sonora fantástica.
- Armonía perfecta entre las dos franquicias que representa.
- Personajes jugables diferentes y divertidos de controlar.
Lo peor:
- Muy pocas horas de duración.
- Pocas opciones de rejugabilidad.