Yo fui un beta tester del New Xbox One Experience, la nueva interfaz de la de Microsoft, que pega un giro radical al aspecto Metro con el que la consola llegó hace ya un par de años. Ahora llega la hora en la que absolutamente todos vosotros tengáis también este nuevo menú, que, spoiler, es infinitamente mejor que el anterior.
Para comprender la razón de New Xbox One Experience primero hay que echar la vista atrás, hay que remontarse al lanzamiento de Xbox One y pensar fríamente a qué se parecía la interfaz antigua de la consola. La respuesta no es muy difícil, es el mundo táctil por el que Microsoft apostó en Windows 8, así como en Lumia y Surface. La interfaz Metro en Lumia es espectacular, además de bonita es funcional y sobre todo, muy ligera. En Windows 8 fue un absoluto desastre, porque Metro parece pensado para manejarse con funciones táctiles y un ordenador es un teclado y un ratón. Windows 8.1, y ahora más decididamente con Windows 10, el OS de Microsoft en sobremesa hizo el mismo recorrido al que acudimos con New Xbox One Experience : adaptar el sistema operativo al input de la plataforma. Si en un ordenador el input es un ratón, en la consola lógicamente es un mando. New Xbox One Experience es muchas cosas, pero sobre todo es una interfaz lógica para utilizar con un mando convencional y no con Kinect. De hecho, no es posible moverse por los menús con las manos y por medio de Kinect, sólo con voz o con el mando. Dicen en Microsoft que es un porcentaje tan pequeño el que tiene Kinect, y que de este porcentaje es tan pequeña la cantidad de gente que se movía por los menús con gestos, que lo más lógico es el camino que tomaron: diseñar sólo para utilizar con mando.
Este recorrido es necesario para comprender por qué hay un cambio radical en el menú de Xbox One tras dos años desde la salida de la consola. No es algo nuevo en sistemas Microsoft, ni mucho menos. Si tuvisteis Xbox 360 desde lo primeros días recordaréis el sistema de pestañas que se estrenó con su llegada al mercado, y que muy poco tiene que ver con el actual de 360 (también muy Metro, por otro lado). Microsoft en este sentido no tiene complejos, y me alegro de que en la era Phil Spencer se tomen decisiones importantes como esta sin dudar: ¿Para qué arrastrar un menú de inicio que no estaba pensado para la Xbox One de 2015, sino para la de 2013?
1 - Velocidad:
No cabe duda de que New Xbox One Experience es un interfaz mucho más ligero que el previo, sólo hacen falta unos segundos moviéndonos por el sistema para ver que todo fluye a otro ritmo. Promocionaba Microsoft este cambio de interfaz asegurando que este es el menú más rápido que hoy día tenemos en consolas, y sin haber puesto el cronómetro a contar, es fácilmente posible.
Sigue, como antes, permitiendo poner cualquier aplicación en segundo plano pulsando el botón guía, y retomar la actividad allí donde la dejamos. El sistema de ahorro de energía mantiene las dos opciones que ya conocíamos, por lo que el inicio automático y las actualizaciones en segundo plano, un elemento que se ha convertido en imprescindible para mí día a día, funciona exactamente igual que antes. Así, dejar un juego en ejecución, apagar la consola, volver, y encontrarlo exactamente en el mismo punto, era un paso atrás impensable que obviamente no se ha dado.
2 - Estética y desplazamiento:
Nótese que le doy más importancia a la fluidez del sistema que a la estética, completamente renovada, de este nuevo menú. La razón es sencilla, el gran problema del menú antiguo interfaz de Xbox One era la fluidez. Era poco amigable, y de uso muy complejo, pero esto se solucionaba con un proceso de aprendizaje. La fluidez era un problema estructural que no encontraba solución alguna... hasta ahora.
Llegó un momento en el que me movía como pez en el agua en la la vieja interfaz, lograba hacer exactamente lo que quería en la consola, y con cada nueva actualización las posibilidades de manejo con el mando se hacían exponencialmente superiores. Pasé en meses de utilizar prácticamente para todo comandos de voz, a dejar Kinect aparcado en pos del mando de control. Sin embargo, el mérito en este caso es más mío que del sistema, porque sé fehacientemente que para un nuevo usuario el primer mordisco de la vieja interfaz de Xbox One era muy complejo. Con esta New Xbox One Experience acudimos a un repaso ergonómico muy interesante para el uso.
El simple hecho de encender la consola y que todo está a la vista es algo que facilita el uso enormemente. Al iniciar el sistema se captas perfectamente que la pantalla se divide en tres partes: una parte superior con pestañas que nos desplaza entre "inicio", "comunidad" y "tienda"; un menú en la parte derecha que desde mi punto de vista es lo mejor de este update, y la parte central con las acciones a poner en funcionamiento.
Para movernos entre las pestañas tenemos, además, varias opciones de control: directamente con el pad o jstick direccional, pero también, mucho más ágil, a golpe de gatillos que nos permiten desplazamientos horizontales y verticales.
Igual que en Lumia, el menú principal de New Xbox One Experience es dinámico, de tal forma que sin abrir aplicaciones accedemos al escaparate de la comunidad y su Feed de Actividad, ahora mucho más importante, y también al escaparate de la tienda de juegos, aplicaciones y multimedia. Si abrimos la tienda accedemos a contenido más en profundidad, pero en el escaparate encontraremos juegos esenciales, los últimos lanzamiento, y esto sin moverse del menú de inicio, por lo tanto accesible de manera instantánea.
3 - El nuevo centro de control:
Nuestro centro de mando de Xbox One, tanto en el inicio como en juego, es el menú desplegable que se abre a la izquierda de la pantalla. Aquí tenemos la información social - amigos, grupos, chat, notificaciones...-, pero también opciones de configuración de la consola, y aplicaciones para acoplar de manera clásica en el marco Snap derecho clásico.
Acceder a este menú con una doble pulsación en el botón guía cuando estamos en juego, o pulsando la dirección derecha del mando si estamos en el menú, es lo mejor del nuevo interfaz. Así tenemos acceso inmediato a toda la información esencial de Xbox One para poner en marcha las acciones principales.
La prioridad, de nuevo, sobre los aspectos sociales, ya que es la información que encabeza este nuevo componente del sistema.
4 - Retrocompatibilidad:
La retrocompatibilidad de Xbox 360, aunque sea una función independiente del menú de la consola, es parte importante de esta actualización New Xbox One Experience, seguramente la parte más importante. La lista de 104 títulos iniciales se antoja algo escasa, y muchos de los nombres no son aquellos con más lustre del catálogo de Xbox 360, pero la función ya está disponible para todos, y esta es una de las novedades más importantes de Xbox One desde su lanzamiento.
El mayor "pero" a día de hoy reside en el hecho de que los juegos retrocompatibles todavía no se pueden comprar directamente en la tienda de Xbox One. Para adquirir juegos de Xbox 360 lo tenemos que hacer a través de la propia Xbox 360 o en la web Marketplace de Xbox.
Si queréis saber cómo descargar vuestros juegos de Xbox 360 en Xbox One, en este pequeño artículo os lo mostramos.
5 - Los aspectos a mejorar:
Lo que más echo de menos en el nuevo sistema es a Cortana. El asistente de voz de Windows 10 está previsto que llegue a Xbox One, donde se antoja como elemento mucho más funcional que en un ordenador. Hablando por Kinect o por el micrófono con Cortana para buscar contenido o escribir mensajes de texto, sería una función perfecta en la consola. Cortana está en camino para Xbox One, pero desconozco qué posibilidades ofrecerá en el sistema. Por ahora tenemos búsqueda por voz con Bing en la tienda, la misma de la que ya disponíamos en el antiguo sistema, pero con Cortana espero que sea una interacción que vaya mucho más allá.
Otro aspecto que se echa de menos, y que también está en camino, es la integración de catálogo retrocompatible en la tienda de Xbox One. Un apartado en la propia tienda para comprar juegos de Xbox 360 es algo que hubiese sido ideal de lanzamiento, pero que por ahora todavía no está disponible.
La fluidez en todos los componentes sociales es algo que se debe mejorar. Tanto para subir capturas de vídeo, como para buscar y ver capturas de vídeo, la velocidad de carga es muy lenta. Mi conexión a internet es 100/100 de fibra, por lo que la lentitud a la hora de cargar este contenido multimedia de la comunidad es un problema de los propios servidores de Xbox One.
Conclusión
No os quepa duda de que Xbox One mejora en uso sustancialmente con el New Xbox One Experience . Todos los que tuviéseis el viejo interfaz notaréis inmediatamente el enorme salto y el cambio radical al que nos enfrentamos, y los nuevos usuarios tenéis la suerte de que directamente váis a utilizar este menú.
Todo lo que hay hoy día funciona correctamente, y eran cambios necesarios e inteligente para un manejo de Xbox One con el concepto de la consola en 2015, ahora sólo cabe esperar que a través de las actualizaciones mensuales se sigan añadiendo nuevos elementos.
El mejor aspecto de todos, supongo que habrá unanimidad, la retrocompatibilidad con Xbox 360.