Análisis 'A Normal Lost Phone' para Switch: Lo que tu teléfono puede decir de ti

¿Qué pasaría si un día encontrases un teléfono desbloqueado en mitad de la calle? ¿Lo cogerías? Y si es así... ¿Mirarías lo que hay dentro? Esa es la original premisa con la que se nos presenta 'A Normal Lost Phone', un título que sigue la senda de juegos como 'Her Story' o 'Gone Home' en el sentido de que la historia no solo es la protagonista absoluta del juego, sino que seremos nosotros, los jugadores, los que a través de nuestras acciones vayamos uniendo las piezas del puzzle para conseguir descifrar qué es lo que está pasando.

El juego nos hace ser actor en la historia, además de jugador. "Alguien" se encuentra el teléfono, pero ese alguien somos nosotros. La interacción entre el título y nosotros se realiza en todo momento a través de la interfaz del teléfono, que replica de manera bastante intuitiva lo que podría ser el menú de cualquier smartphone que podamos usar en nuestro día a día. Comenzando con unos cuantos SMS's recibidos por parte de nuestro padre que nos hacen pensar que el antiguo dueño del teléfono podría estar en peligro, vamos tirando del hilo y descubriendo la historia. A nuestro propio ritmo, reunimos las piezas del puzzle mientras la historia va desenvolviéndose, haciéndonos partícipe en ella no solo como espectador, sino como parte activa ya que tenemos en nuestra mano actuar o no según lo que vamos viendo. Realmente, somos obligados a hacerlo para poder seguir avanzando en la historia, a tornarnos parte activa de la misma y tomar decisiones que realmente no nos incumben, llegando al punto de hacernos pasar por el protagonista de la historia.

Y eso es un punto en el que creo que el título falla. Al hacerse tan cercano a la historia, dando al jugador el papel tanto de personaje ficticio que se encuentra el móvil como el de jugador en sí, el vernos forzados a violar la intimidad de Sam, el chico dueño del teléfono perdido, llegando hasta el punto de hacernos pasar con él para hacer avanzar la historia en un momento que, sin querer entrar en spoilers, es bastante peliagudo. Si, desde el primer momento se te da la oportunidad de "borrar la memoria del teléfono" y así ver los créditos del juego (aunque es una función escondida que no queda claro si es una función "de juego" o opciones como la de cualquier juego para reiniciar la partida guardada), pero no nos engañemos, aquí hemos venido a jugar y la única manera de hacerlo es invadir a intimidad de Sam y tomar la iniciativa por él en algunos momentos.

La interacción se limita a eso, de hecho, el resto del juego es leer sus correos, sus SMS, ver las fotos que tiene guardadas en la galería del teléfono, en foros de internet, y a partir de ahí ir haciéndote a la idea de que ha pasado, averiguar cual es la contraseña del wifi para poder conectarte a internet a través de las pistas que vamos descifrando, entrar en su cuenta de cierto foro para leer sus comentarios sobre ese tema concreto, explorar su reproductor de música, cargado de temas indie que a la vez sirven de banda sonora del juego y que se asemeja un poco a 'Life is Strange', ayuda a conocer mejor la personalidad de Sam... El hecho de que esta versión para Switch permita voltear la imagen en la pantalla y usar la consola en vertical como un enorme teléfono móvil ayuda a realmente sentirte inmerso en el juego y vivirlo mas que como una experiencia lúdica, como una experiencia informativa. Porque si... la verdadera razón de ser de este juego, el verdadero mensaje, no es el dilema de la privacidad. Es algo mucho mas profundo, y muy necesario en los tiempos que corren.

Aviso de spoilers.

Si vas a jugar el juego, te recomiendo encarecidamente que dejes de leer aquí, ya que conocer de antemano el trasfondo del juego arruina por completo la experiencia. Así es, si ya lo has jugado o no tenías intención, adelante.

La historia de Sam no es lo que parece a primeras. Conforme vamos leyendo sus mensajes, vamos oliéndonos que algo raro ha pasado en su vida, algo que le ha descolocado totalmente y que le hace estar perdido. Y es que en un punto concreto de la historia, Sam descubre que realmente es Samina. Si, la historia va sobre como un chico descubre su transexualidad. La manera de presentarlo es bastante natural, vemos la evolución en su pensamiento, como empieza a plantearse algunas cosas a partir de una experiencia que relata, como comienza a explorar su situación, verse en un entorno muy homófobo y recurrir a las comunidades de internet para encontrar apoyo... algo que desgraciadamente, muchos jóvenes transexuales tienen que vivir, el desconocimiento hacia el colectivo transexual y su consiguiente discriminación es una de las grandes lacras de la sociedad de hoy, una de las tareas pendientes que tenemos que enmendar en los años venideros, y juegos como este ayudan a ver ese otro lado y comprender mejor lo que se siente. De hecho, a manera personal, me he sentido bastante identificada. No soy transexual, pero a lo largo de mi vida he vivido en cierto modo esa discriminación ya que por mi forma de ser, mis gustos y mi personalidad en multitud de ocasiones me he sentido discriminada por no compartir los roles de género.

Siempre he pensado que mucha de la problemática de género son los roles impuestos por la sociedad a cada género, roles encorsetados derivados del machismo de la sociedad heteropatriarcal en la que los chicos deben ser muy "machos", y las chicas muy "princesas". No se es menos mujer o menos hombre por no cumplir con esos roles. Pero para muchos, el no hacerlos ya es seña de homosexualidad o transexualidad. Esto es un concepto totalmente equivocado. Tal como como juego deja claro, ser transexual es algo mucho mas profundo que ser una chica a la que le gusta jugar con coches en lugar de muñecas o que no te gusten los vestidos. No tiene nada que ver con la orientación sexual (un chico puede sentirse chica, gustarle el fútbol y sentirse atraído por mujeres, por ejemplo) es algo que está en el cerebro y que cada uno vive de una manera diferente, ni siquiera es necesario sentirse a disgusto con tu cuerpo y querer operarte para serlo. 'A Normal Lost Phone' ayuda a conocer mejor la situación y plantearse muchas cosas que de otro modo quizás nunca nos pararíamos a plantearnos.

Básicamente, hacer pensar y ponernos en el otro lado de la situación. El equipo de desarrollo, Accidental Queens, ha contado con el apoyo del colectivo transexual a la hora de asesorarse para plasmarlo de la mejor manera posible en el juego, de forma respetuosa aunque en ocasiones, un tanto superficial, se podría haber explotado mejor. Por otro lado, es comprensible, es algo demasiado complejo para mostrar de manera totalmente satisfactoria en un juego de apenas 3 horas de duración, lo que hace que el resultado final sea un tanto frívolo.

Un tema tan íntimo como este requeriría algo mas de tacto, quizás un contacto mas directo que simplemente leer un foro donde transexuales hablan sobre sus pensamientos, como descubrieron que lo eran (donde está principalmente el factor educativo, al ver las diferentes formas en las que una persona puede descubrirse) o la manera de "salir del armario" (o no hacerlo, dado el enorme peligro que desgraciadamente muchos sufren al darse a conocer. Como es el caso de Samina, su entorno es extremadamente homófobo hasta el punto de sufrir ataques violentos). Cosas que normalmente, desde nuestra perspectiva privilegiada como cisgénero no llegamos a experimentar e incluso no llegamos a darnos cuenta de que existe.

Es un título necesario en el catálogo de Switch, y en todos los demás. Acercarnos a este colectivo e identificarnos con él es algo vital para seguir avanzando en la igualdad y en los derechos del colectivo. Quizás como juego en sí no sea gran cosa, pero como experiencia es muy recomendable.